El Foro de Periodismo Argentino (FOPEA) fue contundente ante el pedido de la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner sobre una ley de ética pública para periodistas. Se pronunció en contra de la medida considerando que "no es posible imponer conductas éticas en el ejercicio del periodismo".
En un mano a mano con Perfil.com, el vicepresidente de la entidad calificó la medida como "absurda".
“El gobierno de Cristina se queja por la poca calidad de la información pública pero restringe el acceso para que no salga", sostuvo.
Además, Fopea afirmó en un comunicado, que una eventual ley podría poner en riesgo la libertad de expresión.
Fernando Ruiz, además de ser el vicepresidente de Fopea, es el vicedecano de la Universidad Austral en la carrera de Comunicación. En su despacho, recibió a este portal con una metáfora: “Los periodistas somos como peces que nadamos en un agua llamada democracia. Si el agua se contamina, nos contaminamos nosotros. Y sin agua, al igual que los peces, no existirían los periodistas”.
En palabras de Ruiz, “muchos gobiernos han querido contaminar ésa agua para poder gobernar alejados de la crítica”.
- Perfil.com: ¿Qué opinión le merece la medida impulsada por la Presidenta acerca de una Ley de ética pública para periodistas?
- Es algo absurdo. Los periodistas, como todos los profesionales, ya rendimos cuentas sobre nuestras ganancias en el organismo correspondiente. Además, ya tenemos un código de ética. Seguro que se le pueden hacer muchas críticas e inclusive hay que respetarlo más. Los políticos tienen derecho a quejarse por la mala calidad informativa, pero que el Estado interceda en la ética de los periodistas cuando el rol de los periodistas en una democracia de buen funcionamiento es controlar al Estado, es algo absurdo.
- Entonces, ¿por qué cree que la Presidenta impulsa esta medida?
- Es un intento más por controlar a la prensa. Si el interés del gobierno fuera la libre circulación de la información y la transparencia, levantaría el pie de los registros y documentos de información a los cuales hoy es muy difícil de acceder. Hay muchos trámites que es necesario hacerlos con abogados o con gestores cuando la soberanía de la información la tiene el pueblo. Ni hablar de las complicaciones que afrontan en el interior del país.
- ¿Le parece que esta medida es intimidante para los periodistas?
- No la medida en sí, sino la forma y el estilo de estigmatizar a un periodista de ese modo. Además de intimidatorio, es peligroso porque puede tener una repercusión directa en la calle con ese periodista. Claramente son actitudes que perjudican a nuestra democracia.
- ¿Considera que la democracia Argentina está peor que hace 10 años?
- Creo que retrocedió mucho. Con el sólo hecho de que se haya naturalizado que los funcionarios no brinden entrevistas, nos damos cuenta que nuestra democracia está en pañales. No debería ser necesario que un periodista tenga que justificar una pregunta a un funcionario, pero ahora pareciera que sí. Además, a nivel nacional, provincial y municipal, todos los organismos deberían desbloquear el acceso a la información pública. Las declaraciones juradas, los balances, los documentos públicos, deberían estar accesibles en un link.
Ruiz enfatizó que la corrupción en el periodismo existe como en otras profesiones, pero aclaró que el Estado es el mayor corruptor de la prensa. “Es muy grave que se haya naturalizado que la pauta publicitaria se utilice con fines partidarios”, opinó.
Para hablar del reparto de la pauta oficial, Ruiz hizo hincapié en que “ya se intentó con denuncias en los medios y hasta con fallos en la Corte Suprema”. Para el periodista y académico, el manejo de la pauta es tan sólo uno de los ejemplos que dan muestras de una democracia endeble: “Pareciera que la palabra para describir esto es impunidad”.
(*) Especial para Perfil.com