OPINIóN
Estados Unidos en los medios

La elección presidencial que despertó más ansiedad mundial

Biden Temes
Joe Biden sorprendió con el anuncio de planes sociales y de trabajo en medio de la pandemia. | Pablo Temes

Obviamente nos referimos a la de los Estados Unidos, con la derrota final de Donald Trump, todavía no aceptada por él, cosa que hasta suscita la fantasía de que imite de alguna manera a nuestra Cristina, y tal vez no llegue a estar presente en el momento de la asunción de Joe Biden, o de que se llegue al uso de la fuerza pública para que se decida a abandonar físicamente la Casa Blanca. Nosotros los argentinos hace ya años que pasamos a elecciones presidenciales directas, cosa que no entendemos por qué Estados Unidos sigue aferrado anacrónicamente a cincuenta elecciones, una en cada estado, cuyos resultados son los que definen finalmente el resultado, que muchas veces contradice el resultado de lo que habría sido una elección directamente  nacional, como le ocurrió a Gore frente a Bush, y si no recuerdo mal también el adversario de Trump tuvo más votos directos que él cuando se impuso en la presidencia que acaba de perder, tanto en votos directos como en el indirecto. Ya que obtuvo algo así como 70 millones de votos contra 74 de Biden, pero la diferencia a través de los estados fue abrumadora para su derrota. Lo que sería interesante saber es cuántos de esos 70 millones de votos fueron aportados por los más de 90 millones de ciudadanos norteamericanos que son analfabetos funcionales.

Una de las tantas virtudes periodísticas de PERFIL es brindarnos un suplemento dominical denominado La semana internacional, que destaca el tema más importante de 24 medios extranjeros, y en esta oportunidad la mayoría se ocupó de estas elecciones, donde pudimos leer, sin perder horas de recorridos en internet, diversas opiniones, pero con contenidos básicos bastante homogéneos, aunque advirtiendo dudas sobre la gobernabilidad. ComoThe New Yorker que, bajo el título de “Sanación”, decía que Estados Unidos necesitaba ajustar cuentas con la era de Trunp, debiendo recuperarse del trumpismo. Que la administración Biden debía asumir la responsabilidad de guiar al país a través de ese proceso de sanación. Que había que tener en claro que el voto con el cual habían echado al magnate no era suficiente. Porque Joe Biden debía ser el presidente de la clase trabajadora. Y además, que el perfil de Kamala Harris, la vicepresidenta electa, había hecho historia.

Newsweek, titulando “Riesgos”, señalaba que Joe Biden había defendido en su campaña una ambiciosa agenda política que incluía muchas propuestas sobre temas como inmigración, salud, cambio climático y reforma de la Justicia Criminal. Pero que la perspectiva de no controlar el Congreso, son una mayoría republicana en el Senado liderada por Mitch McConnell, amenazaba con bloquear cada una de las iniciativas progresistas provenientes de Barack Obama.

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Por su parteTime, con el título “Curarse”, retomaba el mensaje del presidente electo, Joe Biden, y sostenía que era el tiempo de “curar” al país de la profunda división y los odios que lo atravesaban y que Donald Trump supo explotar y llevar al paroxismo. Y que no había que olvidar algo muy importante: que a pesar de la victoria de Biden, los Estados Unidos de Trump seguían existiendo. El racismo seguía vivo como antes y había mucho que hacer por el país.

L’Express, titulando “Bombero”, señalaba que Joe Biden debería ser el bombero de su país en los próximos cuatro años. Tras un largo camino y un suspenso de días, Joe Biden se había convertido en el presidente electo de Estados Unidos. Pero en un país de fuego y sangre, la misión que se había propuesto, la de unir a América, sería difícil. No debería haber sido una sorpresa, ya que las encuestas lo daban ganador desde hacía meses, pero el sistema electoral y el volumen de votos complicaron todo.

Courrier International, bajo el título de “Batalla legal”, sostuvo que el presidente en ejercicio continuaba impugnando los resultados de las elecciones presidenciales. Había intensificado las acciones legales en Pensilvania, Arizona, Nevada, Georgia y Michigan, “sin mucho éxito” ya que la prensa estadounidense observaba que Trump no había presentado nada que pudiera compararse con pruebas que indicasen un resultado fraudulento, como también lo había señalado la radio pública estadounidense NPR.

Le Point, con el título “Francia y Biden”, señaló que el presidente electo de Estados Unidos ofrecía a Emmanuel Macron una oportunidad histórica para avanzar en su proyecto de una Europa soberana, pero solo el mandatario francés sabía que debía jugarlo colectivamente. Agregando que con la derrota de Donald Trump el populismo había perdido una batalla, pero no la guerra. Por ello había tanto que reconstruir en las naciones libres. Porque la democracia estaba muy golpeada en los Estados Unidos y fuera de sus fronteras.

Luego siguen otros medios, pero por razones de espacio recomiendo a los lectores de PERFIL del domingo 15 que lean las opiniones de otros medios extranjeros que, en general, aceptan la legitimidad alcanzada por Joe Biden, pero advierten de las dificultades que encontrará para cumplir con su agenda progresista, con un Senado republicano y un opositor feroz que será Donald Trump si piensa proseguir en la carrera política.

*Periodista, escritor y diplomático.