Susana Freydoz, única imputada del homicidio de su esposo, el gobernador de Río Negro Carlos Soria, continúa su tratamiento en el hospital de Cipolletti con un acompañante terapéutico y su familia podrá visitarla para participar de la rehabilitación.
La mujer fue internada en ese centro de salud el sábado pasado, por pedido de su abogado, Alberto Riccheri, quien advirtió al juez, Emilio Stadler, sobre el profundo estado de depresión de la viuda.
Desde el día de la muerte de su marido, en la madrugada del 1 de enero, la mujer permanecía en la casa de su hermana, en la localidad rionegrina de Allen.
El diario Río Negro informó que la mujer se encontraba en el área de Clínica Médica del hospital de Cipolletti y su tratamiento será seguido por un acompañante terapéutico. A la vez, sus familiares están autorizados a visitarla, en el marco de su rehabilitación.
La mujer cuenta con custodia policial, aunque la Justicia no le dictó prisión hasta el momento, a pesar de haber sido imputada como presunta autora del delito de homicidio doblemente agravado por el vínculo y el uso de armas.
Freydoz se encuentra en un lugar junto a otras tres personas que atraviesan situaciones de salud similares.