Dos hermanas ancianas fueron halladas muertas en su departamento del barrio porteño de Recoleta, y la policía sospecha que fallecieron hace al menos cuatro meses por inhalación de monóxido de carbono.
Según informaron fuentes policiales, las mujeres, de 89 y 93 años, estaban en una habitación y sus cuerpos, a simple vista, no presentaban signos de violencia. Además, sobre una mesa del departamento, situado en el cuarto piso de un edificio de Juncal 1837, la policía encontró la factura para el pago de un servicio que no fue abonada con fecha en septiembre, lo que indicaría el mes de las muertes.
Los cadáveres fueron descubiertos luego de que el encargado del edificio llamó a la policía al comprobar que del departamento provenía olor nauseabundo y recordar que no veía a las mujeres desde hacía tiempo.
Al ingresar al departamento, los agentes de la comisaría 17 encontraron a las dueñas de casa y comprobaron que no había signos de violencia en el lugar. A partir del análisis de la escena y del examen preliminar de los cadáveres, realizado por los especialistas de la Policía Científica, los investigadores determinaron que las mujeres habrían fallecido por inhalación de monóxido de carbono.
"Suponemos que murieron por el monóxido de carbono, aunque por ser todo tan prematuro no descartamos otras hipótesis. De todas maneras, las pruebas son contundentes y nada indica que hayan sido muertes violentas", contó el vocero de la investigación.