Parque Chas: una contadora murió amordazada por delincuentes
La mujer de 51 años fue asaltada junto a sus padres. Fueron todos maniatados. Ella se asfixió.
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Cedoc
Una contadora de 51 años murió asfixiada tras ser maniatada y amordazada en su casa del barrio porteño de Parque Chas por dos delincuentes que asaltaron la vivienda, donde la víctima estaba junto con sus padres, informaron hoy fuentes policiales.
Los voceros explicaron que, según las primeras pericias, la víctima, identificada como Laura Busato, falleció por una asfixia provocada por la mordaza que le colocaron los ladrones. El hecho ocurrió en una vivienda situada en la calle Tasso 2685, entre Gamarra y Avalos, donde la mujer, quien estaba separada y trabajaba como contadora para una empresa privada, vivía con dos hijos y sus padres ancianos.
Según se explicó, el asalto se produjo poco minutos antes de las 6, cuando dos hombres de unos 25 a 30 años, uno de ellos encapuchado, ingresaron a la vivienda y sorprendieron a los dueños de casa. Luego de asaltar a la pareja de ancianos, los delincuentes redujeron a la contadora, quien junto a sus padres fue atada y amordazada en el living de la vivienda.
Los informantes revelaron que los hijos de la profesional, quienes viven en una vivienda ubicada en el fondo del domicilio, no llegaron a despertarse por lo que no sufrieron el ataque de los ladrones. Los investigadores del caso establecieron que, luego de inmovilizar a las víctimas, los delincuentes recorrieron el lugar en busca de dinero y objetos de valor, tras lo cual, con todo lo robado, escaparon dejando a los ancianos y a su hija amordazados y con sus manos atadas.
Más tarde, la hija mayor de la contadora llegó hasta el living y halló a su madre muerta y a sus abuelos inmovilizados en el piso, por lo que inmediatamente llamó al 911 y policías de la comisaría 39 arribaron al lugar.
Al revisar la casa los agentes comprobaron que tanto la puerta principal del domicilio como sus ventanas no habían sido violentados y que los ambientes estaban todos revueltos. Luego, los especialistas de la Policía Científica realizaron un primer análisis en el cadáver de Busato y determinaron que la mujer falleció por la asfixia provocada por la mordaza que le colocaron los malhechores. Además no presentaba ninguna lesión en el cuerpo.
Tras los estudios preliminares, el cadáver de la contadora fue llevado a la morgue judicial para ser sometido a autopsia y establecer con exactitud las circunstancias de su fallecimiento. Además, los investigadores del caso, pertenecientes a la comisaría 39 y a la División Homicidios, resolvieron hacer un identikit de los asaltantes a partir de los testimonios de los padres de la contadora.
Un vecino contó a la prensa que a la víctima "hace como un año y medio le robaron cerca del subterráneo". Sobre la vivienda, dijo que "es una casa normal como cualquiera, no hay TV plasma, solo hay televisores que tienen 20 años". Y comentó: "Era una excelente persona, tiene una hija grande y dos chicos de ocho y nueve años y nietas. Hace poco su madre cumplió 89 años e hicimos una reunión al mediodía".
