La senadora del kircherismo por Formosa, Adriana Bortolozzi, volvió a darles una sorpresa a los más oficialistas al proponer un nuevo proyecto para modificar la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, que le impide al Gobierno otorgar licencias en localidades con más de 500 mil habitantes, marcando la cancha otra vez y mostrándose como una díscola.
En una carta que tituló, con sorna, "Tribulaciones ante la espantosa bruja que se robó a dos bebés para cocinarlos en el caldero", en clara referencia a Ernestina Herrera de Noble y sus hijos Marcela y Felipe, además de deslizar con ironías que la Ley de Medios tiene como evidente trasfondo un enfrentamiento entre el Ejecutivo y el Grupo Clarín.
En su proyecto, Bortolozzi propone modificar el artículo 161 de la Ley Nº 26.522, que otorgaba a quienes tuvieran licencias de medios de comunicación un año para adaptarse a la nueva norma. Pero la idea de formoseña, sin embargo, prorroga ese lapso de caducidad y establece que los licenciatarios puedan conservar las licencias durante 10 años desde la entrada en vigencia de la ley.
Según precisa esta mañana el diario Ambito Financiero, sugiere que la autoridad de aplicación debe ser "ejercida por un directorio integrado por siete miembros nombrados por el Poder Ejecutivo, previo acuerdo al Senado" sosteniendo, en este marco, que "estará conformado por un presidente y un director de propuestos por el Poder Ejecutivo" y "tres directores propuestos por la Comisión Bicameral de Seguimiento de la Comunicación Audiovisual".
En otro pasaje, afirma que "ahora no vamos a ayudar a la gente a expresarse. A ver fútbol sí, pero sólo gritar ante el televisor, no cantar las cuarentas desde un medio" y asegura "si esto sigue así, tampoco podrá nuestra primera mandataria comunicarse con sus mandantes, porque con esos medios no le creerán".
Una iniciativa que todavía no consiguió el impulso necesario pero ya generó el ruido suficiente, tiene que ver con la financiación de la Iglesia. Un proyecto de la legisladora propone que el Estado argentino corte con los fondos para el clero.