El presidente Alberto Fernández busca acallar las especulaciones que señalan que su acercamiento a China y Rusia podría obrar en desmedro de la negociación argentina con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Mediante una aclaración de sus acciones y dichos recientes, también pretende solventar una relación tirante con Estados Unidos, que comunicó su malestar con voces extraoficiales desde su Departamento de Estado.
El primer mandatario hizo hincapié en que la Argentina debe sostener “una relación madura, franca, sincera y de respeto mutuo” con el país y justificó su acercamiento a China y Rusia. “El mundo es multilateral; nos obliga a vincularnos respetuosamente con todos los países. Viajamos a Rusia y China para promover los vínculos financieros y comerciales”, dijo en diálogo con Radio 10. Ante la escalada de tensiones ruso-estadounidenses frente a una posible ocupación de Ucrania y el boicot de la administración Biden a los Juegos Olímpicos de Pekín, el acercamiento de Fernández fue considerado inoportuno.
Al respecto precisó que “cuando hablé de que Argentina sea la puerta de entrada para Rusia, estaba hablando de inversiones. No voy a imponer un régimen maoísta”.
Haciendo uso de su cuenta de Twitter, el Presidente también hizo especificaciones sobre anteriores comentarios sobre la responsabilidad del gobierno estadounidense a propósito de la deuda que tomó el ex presidente Mauricio Macri con el FMI.
“La administración de Trump, con su voto en el Fondo, facilitó que se diera ese crédito para rescatar al gobierno de Macri, descuidando lo nocivo que era para la Argentina. Esa influencia fue reconocida por funcionarios de aquel gobierno norteamericano. Las características inusuales de ese préstamo desmedido las especifica el mismo Fondo en el informe que recientemente hizo público. No atendió la situación económica de entonces de Argentina e impuso un programa que fracasó claramente”, escribió.
Hizo, sin embargo, una aclaración conciliadora: “Así como Trump en su momento trabajó para favorecer al gobierno de Macri, poniendo en riesgo el futuro de Argentina, digo hoy que el actual gobierno norteamericano, a la hora de darle un comienzo de solución al problema, acompañó con su voto a Argentina y eso lo valoro”.
Al analizar la renegociación con el FMI en declaraciones radiales, también indicó que el acuerdo que promueve el Gobierno “nos libera de hacer pagos durante cuatro años y nos permite seguir adelante con nuestra idea de seguir haciendo crecer la economía”, y dio sustento a su estrategia al señalar que “el año pasado discutíamos si Argentina iba al ajuste o no y terminamos creciendo más del 10 %. Hoy el trabajo formal tiene 50 mil trabajadores más de los que había en 2019. Se sigue invirtiendo, creciendo”.
Proponiendo otra lectura sobre su gira oficial, el jefe de Estado comentó que “la realidad es que fuimos a reforzar y promover nuestros vínculos comerciales y financieros en un momento en que el país lo necesita. No sé por qué viajar a Rusia y China significa que tenemos una mala relación con Estados Unidos”.
“Las cosas no son tan lineales; el mundo no es bipolar, no existe el mundo comunista y capitalista. Uno ve el desarrollo de la industria en Rusia o en China y son todos capitales en gran medida privados y han ganado mercados en el mundo. El principal socio comercial de Estados Unidos es China, no es Argentina. Nada lo hicimos ideológicamente ni posicionándonos en una vereda del mundo”.
El mandatario justificó, a su vez, la decisión de incorporar a la Argentina a la Franja y la Ruta de la Seda, el proyecto económico chino que propone estimular el flujo comercial terrestre y marítimas con Europa, África y América Latina a través de grandes inversiones.
Pidió igualdad de género a privados
El Presidente resaltó ayer el instructivo que deberán adoptar los ministerios y las secretarías de Gabinete para designar autoridades con equidad de género. Este fue compartido en redes sociales por la vocera presidencial Gabriela Cerruti.
“Quiero haber puesto en la cabeza que la mujer tenga el rol que debe tener en el siglo XXI. La igualdad de géneros no debe ser un tema de debate, debe ser una práctica permanente. Cuando planteo que las mujeres accedan a los cargos importantes del Estado, estoy diciendo al sector privado algo parecido”, dijo a Radio 10.
“Hay una parte que no tiene que ver con la vocación política, sino que tiene que ver con lo cultural, que hace que siempre se siga pensando primero en un hombre para ocupar un cargo importante”, señaló con respecto a la predominancia masculina en altos cargos.