El fiscal de Estado de Tucumán, Francisco Sassi Colombres, renunció este lunes a iniciar su segunda gestión consecutiva en el cargo a raíz de las críticas que recibió por parte de organismos de derechos humanos por haber trabajado con un gobierno de la dictadura en la provincia.
Sassi Colombres había jurado nuevamente como fiscal de estado el sábado ante el gobernador kirchnerista José Alperovich, quien inició esta semana su tercer periodo de gobierno.
La dimisión de Sassi Colombres se produjo a raíz de las presiones de organismos de derechos humanos que cuestionaron su pasado como funcionario de la dictadura militar durante la gestión del general Antonio Merlo, en 1982, cuando tuvo a su cargo las negociaciones para la apertura política, según él mismo admitió.
De hecho, al momento de producirse su juramento algunos funcionarios y muchos invitados especiales al acto, como Madres de Plaza de Mayo, se levantaron de su sillas y se retiraron del recinto del teatro San Martín, donde se realizó la ceremonia. Por su parte, tras la renuncia Alperovich evitó formular declaraciones aunque se limitó a señalar: "Era una decisión personal".
Sassi Colombres fue fiscal de Estado hasta 2008, cuando fue propuesto para la Corte Suprema de Justicia y obtuvo el acuerdo parlamentario. Sin embargo, por un pedido expreso de la Nación renunció a ser magistrado y en compensación se lo nombró al frente de la Caja Popular de Ahorros.
En su texto de dimisión, el ahora ex funcionario remarcó: "No tengo nada de qué arrepentirme ni ocultar, los ideólogos de siempre pretenden afectar mi honorabilidad con imputaciones falsas". En su reemplazo asumirá Jorge Posse, hermano del actual vocal de la Corte Suprema de Justicia, Daniel Posse.