A poco más de una semana de haberse elevado a juicio la primera parte de la causa por el atentado a Cristina Kirchner, se reactiva una de las líneas de investigación que quedaron por fuera del requerimiento que hasta el momento tiene en el banquillo de los acusados a Fernando Sabag Montiel, Brenda Uliarte y Nicolás Gabriel Carrizo. Se trata de la llamada “pista Casablanca”, donde se busca dilucidar si el diputado del PRO Gerardo Milman tuvo conocimiento previo del ataque ocurrido el 1° de septiembre del año pasado.
El próximo jueves 22 a las 10, la Cámara Federal Porteña encabezará una audiencia donde se discutirá si procede o no el secuestro del celular del legislador, tal y como lo viene reclamando la querella. Esta semana, y a través de su abogado, Manuel Barros, Milman buscó aplazar sin éxito dicha audiencia tras solicitar una prórroga que fue rechazada por los jueces de la Sala I. Los abogados de la vicepresidenta tienen sospechas fundadas de que Milman sabía del intento de homicidio dos días antes que se llevara a cabo. Es porque Jorge Abello, asesor del diputado oficialista Marcos Cleri, supuestamente escuchó decirles a dos de sus asesoras en la confitería Casablanca: “Cuando la maten yo voy a estar en la costa”.
Con la exposición de las partes en la audiencia, los camaristas analizarán los argumentos y posteriormente estarán en condiciones de resolver si ordenan o no el secuestro del teléfono. Otra cosa que también se espera sea resuelta por los jueces Llorens Bruglia y Bertuzzi en los próximos días es si ratifican o no al fiscal Rívolo luego que la querella reclamó su apartamiento, planteo que fue rechazado por Capuchetti.