La presencia imprevista de Amado Boudou en la reunión del Consejo del PJ bonaerense que aglutinó a representantes de la Casa Rosada, del sciolismo y a los principales jefes territoriales del PJ, causó sorpresa e incomodidad en varios dirigentes que eligieron irse antes de cruzarlo en una conferencia de prensa, donde llamó a "la unidad y movilización del peronismo".
"Esta reunión me parece importante, la presidencia de Cristina va a poner vigor al PJ en esta etapa tan importante. Tenemos que tener al partido movilizado, funcionando a pleno apoyando a la Presidenta y al gobernador, es muy importante para los tiempos que vienen", lanzó el vicepresidente al iniciar la conferencia de prensa junto a la flamante titular del peronismo bonaerense, Cristina Alvarez Rodríguez.
Llamó la atención que el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez y el senador Aníbal Fernández, entre otros, se retiraron antes, y Cristina Alvarez tuvo que ser acompañada por el vicepresidente, quien no tiene cargos partidarios en el PJ, según informó la agencia DyN.
"¿Quién se va a querer sacar una foto con Boudou?", graficó uno de los dirigentes asistentes al cónclave que suele cultivar el bajo perfil y que por razones obvias pidió no ser identificado.
Mientras tanto, algunos intendentes descartaban una eventual candidatura de Boudou a presidir el Justicialismo, e incluso, que haya llegado por instrucción de la Jefa de Estado.
Boudou llegó a la sede de la calle Matheu 130 de esta Capital alrededor de las 13.30, minutos antes de que termine la reunión del Consejo del PJ que duró más de una hora.
Acompañado por el titular de la ANSES, Diego Bossio, y el diputado nacional de La Cámpora "Wado" De Pedro -ninguno de ellos integrantes del consejo del PJ-, entró sin hacer declaraciones y subió al primer piso de la sede justo cuando terminaba el cónclave del PJ, ante la atenta mirada de los peronistas históricos.
Mientras Boudou se alistaba a salir a hablar junto a la flamante presidenta del PJ bonaerense y sobrina nieta de Evita, en el primer piso del edificio otros representantes del gobierno y del peronismo bonaerense salían apurados.
El veterano dirigente de Lanús hoy aliado al gobernador Daniel Scioli, José Pampuro, fue uno de los primeros en irse: "los debates se dieron antes justamente para lograr estos consensos que se vieron hoy" dijo en declaraciones DyN y consultado sobre su abrupto retiro, se limitó a responder: "ya terminó la reunión del Consejo".
Ya estaba parado en la verada de enfrente el senador Aníbal Fernández: "la reunión fue más normal que de costumbre, se aceptaron las renuncias que presentaron y se trataron los temas del día. Se fijó la fecha de internas y del Congreso", resumió el ex jefe de Gabinete que tampoco se refirió a la presencia de Boudou.
"La reunión fue muy buena, sirvió para darle un fuerte respaldo a nuestra Presidenta, hubo una clara expedición sobre el apoyo a la ley de medios y la igualdad del uso de la palabra y la convocatoria a internas y al congreso partidario", resumió Domínguez.
Un "honor". Minutos después, en el primer piso de la sede, Alvarez Rodríguez en su flamante rol definía como "un honor" la visita de Boudou. La miraban a un costado, los intendentes de Ituzaingo, Alberto Descalzo y de La Matanza, Fernando Espinoza y el apoderado partidario, Jorge Landau, tres de los mentores de los reclamos para que el kirchnerismo acceda a movilizar al peronismo bonaerense horas antes de caer en acefalía, precisó DyN.
Luego, Boudou brindó una rueda de premsa e invitó al "festejo popular" que organiza el Gobierno para este domingo, en Plaza de Mayo, en apoyo a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y para conmemorar "El Día de la Democracia y de los Derechos Humanos". "No es una movilización; es un festejo de la democracia y de los derechos humanos", aclaró Boudou.