Luego de que el presidente Mauricio Macri reforzara los controles migratorios a través de un decreto de necesidad y urgencia, el presidente de Bolivia, Evo Morales, envió un sugestivo mensaje a través de Twitter que parecía dirigido a la Argentina: “Hermanos presidentes latinoamericanos, seamos Patria Grande. No sigamos políticas migratorias del norte. Juntos por nuestra soberanía y dignidad".
Esta mañana, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich salió a responder a las críticas de Morales y volvió a defender la postura oficial: dijo que los nuevos controles inmigratorios buscan enfrentar a la "delincuencia" y aseguró que se trata de una norma "exactamente igual" a la de Bolivia. Por otra parte, confirmó que la creación de la Policía Migratoria "es un tema que recién se está empezando a estudiar".
"Las colectividades bolivianas y paraguayas están aceptadas, eso está claro. La ley es la misma que tiene Bolivia, exactamente igual para las personas que tienen antecedentes o cometieron delitos no son bienvenidas", indicó la funcionaria en diálogo con radio Mitre. Y agregó: "Nunca antes como el año pasado hubo la cantidad de visas para ciudadanos bolivianos y paraguayos".
El jueves, Evo Morales anunció que enviará una comisión a la Argentina. La visita tiene como fin evaluar con autoridades nacionales y residentes bolivianos cuáles son los efectos de las recientes medidas migratorias. Será encabezada por el canciller Fernando Huanacuni y también la integrarán miembros del Ejecutivo y Legislativo.
Morales aseguró que los bolivianos que viven en Argentina "no son delincuentes, no son narcotraficantes", y explicaron que los miembros de la comisión harán “una gestión” para que “los compatriotas sepan que no están solos".
“La ley migratoria boliviana dice lo mismo que dice ahora la Argentina y el año pasado 29 argentinos fueron presos en Bolivia por narcotráfico", concluyó la ministra de Seguridad.
