El diputado justicialista Eduardo Camaño será el primer candidato a integrar la Cámara baja en la lista peronista de la provincia de Buenos Aires del aspirante a presidente por Una Nación Avanzada (UNA), Roberto Lavagna.
Así lo anunció este mediodía el propio ex ministro de Economía, quien remarcó que a fines de 2001, “cuando algunos escapaban para asumir las responsabilidades, él asumió por dos días la presidencia de la República”, tras la renuncia de Fernando de la Rúa en diciembre de aquel año.
Por otra parte, se mostró confiado sobre el resultado en las elecciones del 28 de octubre, al recordar que en los comicios legislativos de 2005 el Gobierno “sacó 38 por ciento de los votos y eso ahora es segunda vuelta automática”.
Además, el ex titular del Palacio de Hacienda prometió que si gana las elecciones aplicará un sistema de “escuelas abiertas los sábados y domingos” en 5.800 colegios de zonas pobres para que “haya más horas de enseñanza” y poner en práctica “una gestión distinta”.
“Eduardo Camaño es un hombre que goza de un gran respeto de todos los partidos políticos, por la forma democrática y consensuada con que presidió la Cámara. Va a ser el primer candidato a diputado” de la lista peronista, remarcó Lavagna en declaraciones a Radio América.
Camaño –quien se reconoce como un duhaldista puro– estuvo al frente de la Cámara de Diputados durante buena parte del gobierno de Néstor Kirchner, hasta que en diciembre de 2005 fue reemplazado por el kirchnerista, ex intendente de La Matanza y ahora compañero de fórmula a la Gobernación de Daniel Scioli, Alberto Balestrini.
El diputado, oriundo del distrito de Quilmes, timoneó la Cámara baja durante esa etapa del gobierno kirchnerista, oportunidad en que se aprobaron las principales leyes que había pedido el Poder Ejecutivo, aunque ello no impidió roces con el oficialismo, hasta su desplazamiento final del máximo cargo de ese cuerpo.
En la provincia de Buenos Aires, el binomio Lavagna-Gerardo Morales será respaldado por las dos fórmulas a la Gobernación que encabezan el justicialista y actual diputado Jorge Sarghini y el radical Ricardo Alfonsín, hijo del ex presidente.
Lavagna, por otra parte, criticó al gobierno de Kirchner por entender que enhebró una alianza con “los capitalistas amigos” y advirtió que “hay que tener cuidado con el capitalismo amigo porque son los que ganan licitaciones”. Inclusive, acotó que esa práctica “se hace en perjuicio de la mayoría de los habitantes del país porque se le dan concesiones a empresas a las que no se deberían darles”.
También cuestionó la gestión en materia educativa al afirmar que en ese área “estamos decididamente muy mal. Actualmente, el grueso de los chicos tienen cuatro horas de clases, cuando las tienen. Es menos de lo que ocurre en Perú o Guatemala”, ejemplificó.
Fuente: DyN