La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner apeló este miércoles el procesamiento con prisión preventiva impuesta en su contra por el juez federal Claudio Bonadio en el marco de la causa por traición a la patria y encubrimiento por la investigación de la AMIA.
Lo hizo a través de su abogado Alejandro Rúa para que la Cámara Federal revise la medida impuesta por el juez de primera instancia, y lo mismo hizo respecto al embargo de 50.000.000 de pesos.
También apelaron el ex líder de Quebracho Fernando Esteche y el supuesto representante iraní en Argentina, Jorge Khalil, quienes se encuentran detenidos desde el pasado 7 de diciembre cuando el magistrado ordenó detenerlos junto a el ex secretario General de la Presidencia Carlos Zannini y el dirigente piquetero Luis D'Elía. En la misma causa están procesados sin prisión preventiva al ex titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) Oscar Parrilli y al diputado Andrés Larroque.
Tal y como anticipó la semana pasada la abogada de la ex mandataria y del canciller Héctor Timerman, Graciana Peñafort, ninguno de ellos tiene la intención de apelar los procesamientos, pero sí los pedidos de detención. El magistrado dispuso la prisión domiciliaria para el ex funcionario debido a su delicado estado de salud.
La estrategia es no apelar al procesamiento para ir rápido a juicio oral, pero puede ser que el mismo se demore dado que algunos de los otros once procesados sí podría apelar a la decisión de Bonadio. Hasta que no se resuelvan los pedidos de todos los implicados no se podrá avanzar en el proceso.