Cristina Fernández inauguró en Haedo una fábrica de electrodomésticos "de industria nacional con capitales mexicanos" -según explicó- junto al gobernador Daniel Scioli. En el acto, la Presidente volvió a cargar fuerte contra los medios, a los que acusó de montar una "cadena nacional del miedo y el desánimo" por "tanta mala onda propalada".
"Siempre son títulos de catástrofe y horror. Es la cadena nacional del miedo y el desánimo", señaló enfurecida la Presidenta, aunque advirtió: "Hay tanta mala onda propalada, cada vez con más intensidad, pero eso será hasta el 1º de diciembre, cuando se cumpla la Ley de Medios".
La Presidente se mostró enojada por las críticas al exceso del uso de la cadena nacional en las últimas semanas -planteo también de la oposición en el Congreso- y se descargó otra vez contra la prensa crítica, aunque esta vez sin apelar a su cadena nacional.
"El otro día hicimos una inauguración y no salió ni así chiquito en los diarios. Nunca una buena noticia (...) Miren, todos estos pibes tienen trabajo, aunque lo quieran ignorar", siguió la Jefa de Estado.
Críticas para todos y todas. El ex titular del Banco Central, Alfonso Prat Gay, dijo que el viceministro de Economía, el joven Axel Kicillof, "se chupaba el dedo" cuando él dirigía el BCRA. Cristina no se quedó callada y como represalia para defender al militante de La Cámpora ventiló en público cómo fue la salida del actual diputado de la Coalición Cívica de la entidad monetaria.
"Nunca le presenten la renuncia a los Kirchner. El la presentó si no se nombraban dos directores que él quería. Lo hizo como para presionarnos, pero ya le habían avisado que no le hicieran porque nadie se queda devuelta con la renuncia (...) Me da un poco de fastidio escuchar esas cosas", expresó.
"Que diga que se tuvo que ir por las peleas con el ministro de Economia por las políticas activas que tuvimos (...) Siempre con el Banco Central tuvimos peleas, salvo desde que está Marcó del Pont (...) Los que estaban antes eran todos monetaristas", señaló la Presidenta. "Hemos tenido cada presidente del Banco Central... Me refiero también quién nos hizo un escándalo por las reservas", apuntó respecto a Martín Redrado.
Según CFK, "hay gente que está enferma de importancia. Es lo peor que le puede pasar a cualquier dirigente político. Creerse más de lo que es. O "creérsela", como dicen los chicos. Nunca te la creas: seguí trabajando como el primer día", indicó en alusión a Prat Gay.
Contra España. Después del cortocircuito por YPF, Cristina Kirchner optó por alejarse aún más del gobierno de Mariano Rajoy. "Si la Bolsa de acá prohibiese las operaciones a corto plazo, nos criticarían todos", advirtió y cuestionó el salvataje a Bankia. "¿Entra en la cabeza de alguien, es racional, que le den 23.000 millones de euros a un solo banco cuando hay mineros en protesta? ¿Eso es capitalismo o es locura?", continuó.
De paso, comentó que a los mineros españoles los "reventaron a palos" durante las manifestaciones.
