“No voy a dejar a los intendentes abajo del escenario mientras arriba están algunos impresentables”, se quejó Cristina Kirchner el viernes a la noche en comunicación con una persona de su entorno. La ex jefa de Estado dinamitó así el acto en Ferro, que iba a ser este miércoles, y lo pospuso para marzo, en un estadio abierto y con más gente.
El acto en Ferro era el resultado de una serie de reuniones semanales en Los Chisperos, el restó peronista de San Telmo, entre diferentes corrientes kirchneristas ajenas al PJ. Según una importante fuente cristinista, la ex mandataria estalló por la idea de un grupo, principalmente de Nuevo Encuentro, de hacer un acto para “pocos”.
Primó la idea de La Cámpora, de hacerlo en marzo junto a un Congreso Programático de la Convocatoria Federal Kirchnerista en un estadio abierto con un llamado más amplio, no sólo para dirigentes. De acuerdo a la misma fuente, Cristina no quería compartir escenario con, como estaba previsto, algunos dirigentes piqueteros. En diálogo con PERFIL, el dirigente Luis D’Elía negó que el acto se hubiera suspendido por internas entre los distintos sectores. “Las diferencias tenían que ver con las expectativas de la cantidad de gente que iba a ir”, dijo.
También en conversación con este diario, un colaborador de Martín Sabbatella, líder de Nuevo Encuentro, rechazó de plano que la ex presidenta se hubiera enojado con el ex titular de la Afsca. “Rumores siempre hay, pero se terminan cuando Martín esté otra vez con Cristina en un acto”, explicó.
Lo cierto es que la usina de rumores sobre diferencias internas entre La Cámpora y Nuevo Encuentro surgieron del propio kirchnerismo.
Carlos Heller, de otra organización kirchnerista, advirtió a PERFIL que las diferencias eran entre los que querían un acto grande en marzo, como La Cámpora, y los que pretendían uno más chico, con dirigentes, ahora en diciembre.
Sin embargo, ayer, en Lanús, la ex presidenta estuvo con Sabbatella en el tercer encuentro nacional de salud. Allí, la ex mandataria cuestionó con dureza al “neoliberalismo” que, dijo, aplica en Argentina “políticas criminales y genocidas”.
Para la ex presidenta, el modelo de Mauricio Macri se propone desorganizar la vida de la gente y quitarle derechos. Y se refirió a la posibilidad de su regreso a la Casa Rosada. “No se trata de que vuelva una persona, se trata de que vuelva la sociedad empoderada”, dijo.
“Se viene más ajuste”
El ex ministro de Defensa Agustín Rossi y el ex gobernador bonaerense Daniel Scioli encabezaron ayer un acto en Rosario y advirtieron que se viene “la segunda etapa del ajuste” por parte del gobierno de Mauricio Macri. Para los dos referentes kirchneristas, hay que poner un freno a las políticas de Macri en las urnas el año que viene, cuando se renueven las bancas en el Senado y en Diputados, además de las Legislaturas provinciales y los Concejos Deliberantes.
El ex gobernador y ex candidato presidencial consideró que se viene una etapa de “flexibilización laboral”. Y pidió al peronismo dar señales claras de confianza y esperanza para los argentinos “que padecen las políticas” de Macri. El acto se desarrolló en el Paseo Néstor Kirchner de Rosario, donde se transmitió el documental de Daniel Scioli, al cumplirse un año del debate con Macri.