Tal como se previa, el vicepresidente de la Nación, Julio Cobos, devolvió a Diputados la media sanción de la reforma del impuesto al cheque para su tratamiento, horas después de que el titular de la Cámara Baja, Eduardo Fellner, solicitara su revisión en el Senado, al considerarla inválida porque fue aprobada por mayoría simple y por orden de la Presidenta, Cristina Fernández de Kirchner.
A través de una carta, Cobos explicó que el giro cumple con los requisitos exigidos por la legislación vigente y no viola la Constitución ni los reglamentos del Congreso. Minutos después de las 17, el expediente de la media sanción fue remitido a la Presidencia de Diputados con la misiva.
En ella Cobos esgrimió que el " 'deber de ejercer una revisión preliminar . . .' se agota con la lectura de la versión taquigráfica de la sesión de los días 14 y 15 de abril, así como de las planillas de votación de las cuales, la primera es sobre el encuadramiento constitucional y la segunda sobre el proyecto propiamente dicho" y aseguró que no "hay un error formal sobre la aplicación de la ley de caducidad, ni duda alguna sobre las mayorías requeridas".
"Como Usted advertirá, en los antecedentes referidos la duda sobres las mayorías surgieron después de las sanciones. En este caso, a diferencia de los antecedentes citados, la discusión sobre el encuadramiento constitucional se dio en el pleno de la Cámara, previo a la votación del proyecto y resuelto por los señores y señoras Senadores", asentó el vicepresidente.
En ese sentido, sostuvo que "el Senado de la Nación, en sesión plenaria, resolvió considerar el asunto que nos ocupa con el enfoque y las mayorías ya explicadas." por lo que "excede por completo la posibilidad constitucional de esa Presidencia devolver la sanción oportunamente comunicada por este Cuerpo como expediente 10-S-10, a título personal y por las consideraciones que advierte".
"A la Cámara de Senadores le comunica la Cámara de Diputados y viceversa, ambas superan la voluntad y deseos de sus Presidentes", argumentó Cobos, para quien el órgano pertinente que debía rechazar la media sanción y remitirla al Senado era el plenario de Diputados y no su presidencia.
De esta manera, resta ver si Fellner cumplirá con la palabra empeñada de dar tratamiento al tema a través del envío a comisiones, tal como adelantó en su carta al titular del Cámara Alta.