La doctora Rosario Escalante fue candidata a intendenta de Barranqueras, Chaco, por la lista oficialista de Jorge Milton Capitanich. Su carrera política quedó trunca tras la difusión de “Carbón Blanco”, la causa de narcotráfico más grande de la historia reciente argentina.
Su marido es Luis Ocampo, despachante de aduana que estuvo detenido acusado de ser parte de la operación narco junto con los comerciantes Rubén Félix Esquivel, Carlos Pérez Parga, Héctor Ángel Roberto, el empresario Patricio Gorosito y el polémico abogado, Carlos Salvatore, con vínculos con los servicios de inteligencia.
Escalante habló con Perfil.com, primera entrevista con un medio nacional: “La droga no salió del Chaco, a mi familia le arruinaron la vida, Capitanich nos soltó la mano”, sentencia la mujer. Ocampo era Presidente de la Cámara de Comercio Exterior chaqueño y despachante de aduana desde 1996 con la empresa Logiser.
Por su tarea conoció a Juan Carlos Rodríguez, quien fuera titular de la empresa Carbón Vegetal del Litoral SRL hasta el escándalo. Según la investigación realizada por la jueza federal Zunilda Niremperger, la empresa era “fantasma” y, en su base de operaciones en Quitilipi se introducía la droga en bolsas de carbón vegetal que luego recorrían El Chaco hasta el puerto de Barranqueras.
De allí, vía terrestre, la cocaína y el carbón llegaban al puerto de Buenos Aires con destino europeo. Escalante está convencida que la droga no salió del Chaco sino de la capital argentina con complicidad de las altas autoridades de la aduana: “Habría que ver por qué se protegió a esa gente”, asegura la mujer que no está citada como testigo en el juicio que se desarrollará desde el 10 de junio hasta fin de mes.
En cambio, para los allegados al empresario Patricio Gorosito, “el carbón llegaba de Santiago del Estero” y la droga se envasaba en la provincia gobernada por Capitanich. “Toda la plata de la logística la manejaba Coqui” aseguran desde el círculo del empresario del fútbol. Gorosito fue presidente de Arroyo Fútbol Club que tuvo nexos con el Barcelona de Lionel Messi.
Es más, el astro del fútbol visitaba el pequeño estadio de Arroyo Seco. La fuerte denuncia contradice lo que declararon Di Renzo y Prodan ante la policía portuguesa: “La plata del transporte la daba Gorosito”. En el círculo del empresario que estuvo detenido tres años sin sentencia firme, lo desmienten: “El poder político está preocupado y la justicia no quiso investigar si existieron reuniones entre Salvatore, Gorosito y Capitanich”. ¿Dónde? En el hotel Gualok.
Las fiestas en el Gualok. Daniel Miño Rusch fue doorman durante 3 años del Hotel Gualok en Sáenz Peña, a pocos kilómetros de Quitilipi. En diálogo con Perfil.com recuerda sus funciones en la cadena hotelera gerenciada por los hermanos Alejandro y Marcelo Pajor: “El doorman es el que recibe a los huéspedes más importantes al llegar al hotel, también estuve a cargo de la suite presidencial y la del gobernador”.
Sus fotos junto a figuras del espectáculo certifican su paso por allí ratificado por dos ex compañeros de trabajo. ¿Allí lo veías al gobernador y a los detenidos de la causa “Carbón Blanco?”: “Allí se hacían “los arreglos”, todos saben que el hotel es del Coqui” explica a Perfil.com Rusch, luego de dialogar durante un año con este cronista.
Consultado por este medio, Marcelo Pajor no niega que hayan pasado por el Gualok de Sáenz Peña los involucrados: “Está todo en manos de la justicia”. Sin embargo, el abogado de Gorosito aún se pregunta por qué la fiscalía no quiso cruzar fechas ni averiguar si pasó su defendido por el prestigioso hotel.
Pajor también recuerda que Sergio Schoklender se hospedó en el hotel que gerencia junto con su hermano. Un día después de la muerte del fiscal Alberto Nisman, el propio Schoklender me admitió que conoció ese hotel: “Se descompuso el avión y pasamos una noche allí”.
No se habría tratado de una única noche. “Allí se realizaban “los arreglos” y las partuzas” explica el ex doorman. Miño Rusch explica que “las fiestas se organizaban por la madrugada, el quinto piso era reservado por los políticos, personalmente manejaba una agenda de servicios escorts –se trata de prostitutas vip-.
Pajor, molesto con la pregunta, indaga a Perfil.com: “¿Me estás tratando de proxeneta? Imaginate que en cualquiera de mis hoteles viene una pareja y se aloja… ¿cómo voy a preguntarle a la piba si cobra?” Legalmente, la cadena hotelera pertenece a lotería chaqueña pero el empresario se queja de los millones de pesos que el gobierno de Capitanich le debe.
SIDE de Salvatore y Stiuso. “La investigación de Carbón Blanco” la hizo el misionero Allan Bogado, aseguran desde el entorno del supuesto espía investigado por el fallecido fiscal Nisman. Tras el asesinato de Nisman, Jaime Stiuso salió del país en una camioneta que sería propiedad de Damián Sierra, funcionario de la Aduana.
“Jaime garantizaba la protección de la SIDE al carbón, las manzanas y el esquí blanco en todo el país” asegura un espía enfrentado con Stiuso. El hombre está convencido que la droga de “Carbón Blanco” bajaba de Rosario a Capilla del Señor en paquetes de 100 kilos y de allí, con protección de la Aduana, llegaba al puerto de Buenos Aires.
Hay un dato llamativo: Ana Cristina Palesa certificó las empresas de Salvatore como así también las de Guillermo Michel, director de Aduanas y mano derecha del titular de la AFIP, Ricardo Echegaray. Palesa firmó en las empresas del ex pirata del asfalto, Jorge Lambiris, íntimo amigo del hombre fuerte en la AFIP.
Lorena Martins recuerda que su padre recibía asesoramiento legal del abogado Carlos Salvatore. El 15 de agosto del 2011 le escribió un correo a su madre y a ella para asesorarlos por un problema contable y fiscal en el boliche swinger Anchorena. El local fue allanado tras la caída en desgracia de Stiuso.
En aquel momento, Salvatore se lamentaba de “no haber estado desde que comenzaron los problemas, pero no vamos a llorar sobre la leche derramada”. Salvatore habría intentado comprar a la jueza chaqueña Niremperger a quien amenazó de asesinarlo en un diálogo con su propia esposa, Silvia Susana Valles, involucrada en otra causa paralela por lavado de dinero.
En la ex SIDE, enfrentada con Stiuso, se preguntan por qué razones la justicia protegió a las altas esferas de la Aduana. La respuesta parece obvia. La semana pasada apareció “ahorcado” en la cárcel de Devoto, el español Daniel Herrera Zarzoso. Estaba detenido por narcotraficante en la causa conocida como “sky-mal”. En el 2014 se incautaron 24 kilos de cocaína y mil pastillas de éxtasis dentro de bolsas de esquís.
Los estupefacientes se vendían en la zona de Recoleta y el hermano del recepcionista Gaby Álvarez, Ariel era otro de los involucrados. El español detenido en la Argentina tenía ganas de romper el silencio y hablar de la protección política de sus negocios. Le mandó un mensaje al celular de su madre en España para felicitarlos por la llegada de un nuevo integrante a la familia.
La madrugada del martes pasado apareció ahorcado en su celda. Hasta ese momento, un involucrado en la causa “Carbón Blanco” oscilaba entre hablar y callar. El escándalo recién comienza.
(*) Especial para Perfil.com. En Twitter: @luisgasulla.