A la madrugada, cuando en el búnker del Acuerdo Cívico y Social las caras eran más que largas por el tercer puesto en la Capital, opacados por el fenómeno de Pino Solanas, llegó la cifra que le permitió respirar a todos los que trabajaron en la campaña: su fuerza alcanzaba el 19% de los votos, permitiendo el ingreso de Elisa Carrió al Congreso.
Tras el suspenso, llegó la alegría. "Hicimos una excelente elección, ganamos el país y dimos un batacazo en Santa Cruz", confió un colaborador de Carrió a Perfil.com. E hizo una autocrítica: "Nos faltó un poco en la Ciudad".
De todas formas, Lilita , quien puso en duda su ingreso al Congreso los días previos a la elección, demostró estar más allá de los resultados y expresó que de ser necesario sacrificar la Capital para ganar el país, ella lo haría.
"Nada va a poder esconder esta derrota", fue la frase que utilizó Carrió para dar un cuadro sobre el resultado del kirchnerismo a nivel nacional y en la provincia de Buenos Aires, en particular. Al tiempo que señaló que esta elección es una oportunidad para iniciar la "construcción de una fuerza para ser la alternativa en 2011".