Congreso paralizado: ¿quién tiene la culpa?

La realidad indica que el Congreso está paralizado. Se debate en comisión pero no se vota ni se decide en el recinto. Son más las sesiones fracasadas por falta de quorum en Diputados y Senadores, que las que tuvieron éxito. En el oficialismo le echan la culpa a la oposición, por violentar reglamentos y no ser capaz de reunir el número de parlamentarios necesarios para empezar a debatir. El arco antikirchnerista responsabiliza al oficialismo, lo acusa de llevar adelante un golpe de Estado contra el Congreso y hasta de apelar a formas propias del "terrorismo de Estado".

El más duro en cargar contra el oficialismo fue el senador Ernesto Sanz: "Hay una suerte de terrorismo de Estado contra los políticos opositores; a mi me lo hizo el ministro del Interior, Florencio Randazzo, pero no fui el único perjudicado. También lo sufrieron Carlos Reutemann, Felipe Solá y Mauricio Macri”, disparó. El diputado del PRO, Federico Pinedo, no se quedó atrás y acuso al kirchnerismo de incurrir en un "secuestro de la democracia".

Elisa Carrió no se calló la boca y denunció que "hay diputados que se dicen opositores, pero, en realidad, son funcionales". Sus palabras iban dirigidas a los bloques de centroizquierda y Pino Solanas decidió responderle: "Es una chicana sin sustento porque hemos venido todos trabajando juntos para que se hiciera la sesión", retrucó Pino, que afirmó que llegaron tarde porque la chicharra no sonó en el edificio del anexo de la Cámara de Diputados, donde se encontraba la mayoría de parlamentarios.

Por su parte, Paula Bertol, del PRO, hizo catarsis por Facebook después de la fallida sesión de ayer: "Fue realmente oscuro. Quiero que sepan que viví con muchísima angustia todo lo que ocurrió, buscan la parálisis del Congreso, no tienen los votos y por eso la desesperación", acusó y repartió críticas dentro del antikirchnerismo: "A los miembros opositores que a veces están en el NI , entiendan que a los tibios los vomita Dios". Graciela Camaño del PJ disidente fue más allá: acusó al kirchnerismo de estar "complotando contra el Poder Legislativo" y reclamó la destitución del kirchnerista Eduardo Fellner como presidente de Diputados por "falta de hombría".

"Siempre hemos dicho que esta mayoría de 37 que se expresó en las comisiones era una mayoría frágil, no se trata de un grupo que nació con 37; se fue conformando", reflexionó el senador Samuel Cabanchik, del unibloque Buenos Aires Federal, quien sostuvo que el PJ disidente es al mismo tiempo el sector más frágil, pero el que tiene más potencialidades de sumar a aquellos que no alberga el oficialismo. " Quitar y poner quórum está dentro de las herramientas legítimas, oficialismo y oposición tendremos que acostumbrarnos a ganar y perder, pero dar debate".

En el Senado, desde los diferentes bloques opositores confirmaron a Perfil.com que estarán cada día de sesión en sus bancas. En Diputados adelantan lo mismo, aunque algunas voces ya comienzan a hablar de "cierta ingenuidad" por parte del arco antik. Así las cosas, el oficialismo con sus alfiles Miguel Ángel Pichetto y Agustín Rossi fue tajante: si la oposición no reúne el quórum no bajarán, a menos que la reunión de labor ordene los temas de debate cómo ellos quieren. En la Cámara Alta, todo dependerá de Menem; en la Baja, del estado de ánimo opositor. Nada indica que la próxima semana no se repita lo de ayer. "Va a ser un quilombo", se sinceró una fuente parlamentaria.

¿Quién tiene la culpa? "Hay una responsabilidad política de la oposición, de no tener el quórum necesario, y del oficialismo en no bajar al recinto, y en el caso de Diputados de haber dado tan poco tiempo para levantar la sesión", explicó a éste portal el sociólogo y consultor político, Ricardo Rouvier. "La culpa de que el Congreso este paralizado es de ambas partes, la sociedad lo ve así, no se ve en términos de buenos y malos, sino que todos contribuyen a que la política no pueda desarrollarse", dijo.