POLITICA
para no ser atrapado en paraguay

Creen que Pérez Corradi paga $ 100 mil por mes

El presunto autor intelectual del Triple Crimen contaría con la complicidad de la policía paraguaya. Cómo se financia.

Está acusado de ser el autor intelectual del triple crimen.
| cedoc

A Ibar Pérez Corradi lo buscan agentes de la Agencia Federal de Inteligencia, efectivos de la División de  Drogas Peligrosas de la Policía Federal, Gendarmería e Interpol. Ninguno pudo atraparlo, pese a que estaría muy cerca de la Triple Frontera, refugiado en un lujoso country, ubicado a ocho kilómetros de Ciudad del Este, en Paraguay. El gobierno argentino cree que logra mantenerse en la clandestinidad gracias a la complicidad de la Policía Nacional paraguaya.

Según indicaron fuentes de inteligencia a PERFIL, Pérez Corradi pagaría unos 100 mil pesos mensuales la fuerza de seguridad de ese país a cambio de cobertura y protección. ¿Cómo se financia desde la clandestinidad? Según indicaron las fuentes, creen que el prófugo continúa en el negocio de la efedrina y estaría asociado a un hombre de origen chino para traficar la sustancia desde ese país.

Las características naturales del territorio en el que fue emplazado el barrio privado en el que estaría  viviendo Pérez Corradi explicaría, a la vez, que pueda ingresar y salir de Paraguay hacia Brasil sin ser  visto. El Paraná Country Club está ubicado a orillas del torrente de agua que divide a los tres países. “La densa vegetación y la oscuridad de la noche, hace imposible la visibilidad en el río. Es sencillo pasar de un país a otro, sin ser detectado”, indicaron a este diario fuentes del caso. En febrero pasado, el  financista estuvo a punto de caer, cuando fue detectado por agentes de Gendarmería. Sus abogados Carlos Broitman y Juan José Ribelli anunciaron que había sido atrapado en Paraguay. Incluso,  denunciaron que había sido “detenido ilegalmente”.

La frustrada captura pudo también deberse al enfrentamiento diplomático entre fuerzas de seguridad de  Paraguay, por un lado, y Brasil y Argentina por el otro. Ambos países se quejan de que Paraguay no colabora en las investigaciones para atrapar a los delincuentes que operan desde la Triple Frontera, donde es común el tráfico de armas, de personas y de drogas.