La presidenta Cristina Fernández de Kirchner defendió lo que denominó "economía popular", pidió no "estigmatizar a los trabajadores informales" y reclamó a la dirigencia en general a "seguir incorporando gente a la formalidad laboral".
"Los dirigentes políticos debemos tener una visión menos lineal" y luego de recordar la Argentina del 2001, reclamó que "tengamos memoria, seamos solidarios, generosos y no estigmatizemos ni persigamos, impulsemos que las cosas se hagan mejor para todos", aseguró Fernández de Kirchner.
La Jefa del Estado aclaró especialmente que no se refería a organizaciones" que impulsan el trabajo precario, sino a que los trabajadores que "por el crecimiento en la economía tengan oportunidad de hacer su propio emprendimiento", según informó la agencia DyN.
Antes de finalizar su discurso, la mandataria bromeó con Amado Boudou que la acompañaba en el estrado. "Hoy estrenamos vicepresidente", lo presentó, y agregó "miren, se pone colorado, es una buena señal".
La mandataria encabezó la ceremonia de entrega de aportes no reintegrables a parque industriales de distintos puntos del país y mediante videoconferencia inauguró un shopping en Tierra el Fuego y puso en marcha en la localidad bonaerense de Boulogne la primera línea de motos Suzuki.
