La presidenta Cristina Fernández de Kirchner llegó hoy a Cuba y allí ratificó que "siempre" apoyará a dicho país en sus reclamos contra el bloqueo comercial que le impuso Estados Unidos. Tras arribar a la isla comandada por los hermanos Castro, calificó como un "acontecimiento histórico" la misa que oficiará allí mañana el papa Francisco.
La mandataria dialogó con la prensa local y dijo que era "un honor" estar allí y, en especial, "que nos inviten a un acontecimiento histórico como el que se va a vivir mañana en la plaza de la Revolución con una misa del Papa", según informó la agencia DyN.
Cuando le preguntaron sobre si Argentina se mantenía firme al lado de Cuba en su reclamo contra el bloqueo de varias décadas, sostuvo: "Siempre, siempre es una política de estado". Y agregó: "No hay país democrático en América Latina ni del mundo que (no) repudie el bloqueo".
La jefa de Estado también observó que "los muros y bloqueos en el mundo van cayendo y cuando no caen por acciones nuestras terminan cayendo por el peso de la propia historia". Y precisó que su vista a Cuba "es como estar en casa, es un placer enorme estar aquí".
En la comitiva oficial viajaron el canciller Héctor Timerman, el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro, el secretario de Culto, Guillermo Olivieri, y el embajador en el Vaticano, Eduardo Valdés.
La presidenta tiene previsto presenciar mañana a las 9 la misa que encabezará el Papa en la Plaza de la Revolución, donde Francisco impartirá la primera comunión a cinco niños, como "un signo de esperanza y crecimiento de la Iglesia en Cuba".
