La presidenta Cristina Fernández afirmó esta tarde que "de los que agravian nadie se va a acordar", al tiempo que señaló que "ha llegado la hora del trabajo y el esfuerzo" a "volver a poner de pie a nuestro país". Fue durante un acto en Pico Truncado, provincia de Santa Cruz, en la que se inauguraron obras eléctricas.
Fernández de Kirchner señaló "cuánto tiempo hemos perdido en discusiones estériles. Estas torres significan más desarrollo y más emprendimientos, no sólo en energía, sino también en más trabajo para los argentinos. Esas son las cosas que nos deben preocupar y ocupar".
Fernández también se refirió al paso de su marido, Néstor Kirchner, tanto como intendente como gobernador de Santa Cruz, y destacó: "Siento que el esfuerzo valió la pena. Siento que las cosas que nos han tocado vivir, aunque con agraviantes, y descalificaciones, valen la pena, porque estas cosas van a quedar en la historia, pero de los que agraviaron no se va a acordar nadie".
La jefa de Estado también recordó que "hoy se cumplen 31 años de la primera ronda que un puñado de mujeres, muy valientes, que comenzaron a dar vueltas en la pirámide la Plaza de Mayo", y agregó: "Quiero recordarlas desde aquí. Porque ellas parieron la democracia argentina.
Fernández también se refirió a la desaparición de Juan Evaristo Puthod, representante de Derechos Humanos del partido bonaerense de Zárate y testigo de causas por violación de derechos humanos en la dictadura militar. "Quiero expresar mi honda preocupación, hoy he tomado conocimiento ha desaparecido un testigo clave", destacó y dijo que están en constante comunicación con las autoridades de la provincia de Buenos Aires.