La presidenta Cristina Fernández de Kirchner fue recibida esta mañana en audiencia privada por su par francés, Nicolás Sarkozy, en el Palacio del Eliseo, en París. Según fuentes oficiales, el encuentro comenzó a las 12 hora de Francia (7 de la Argentina) y finalizó 50 minutos después.
El diálogo entre ambos mandatarios se basó en el desarrollo de las relaciones bilaterales. Se especula que la jefa de Estado insistió en cuestionar las políticas impulsadas por los países desarrollados y que reivindicará el modelo instaurado desde el 2003 en el país que permitió superar la crisis del 2001.
El mandatario francés había recibido a Cristina en la escalinata del patio principal del Palacio, el Perron, donde una guardia le tributó los honores de práctica. El encuentro se produjo en el tercer y último día de la visita oficial de la Presidencia a Francia.
Luego del diálogo que los dos presidentes mantuvieron a solas, se sumaron por el lado argentino el canciller Héctor Timerman; el secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zannini; el vocero presidencial, Alfredo Scoccimarro, y el embajador argentino en Francia, Aldo Ferrer, por el lado argentino. La audiencia ampliada se desarrolló en otro de los patios del Palacio, alrededor de una mesa instalada bajo una galería, en una jornada soleada.
Ayer, al encabezar un acto en la embajada argentina en París, la Presidenta agradeció a Francia por "todo lo que significó en materia derechos humanos" y por haber sido "refugio para los que huían del país" durante la última dictadura.
A las 10, participará de la cermonia la cual la UNESCO le otorgará el Premio por la Paz a las Abuelas de Plaza de Mayo, tras lo cual emprenderá el regreso a la Argentina.
Por su parte, la agenda de este miércoles de Sarkozy no parece menos agitada. Acompañado por la canciller alemana Angela Merkel y por el primer ministro griego George Papandreou buscarán esta tarde formas para controlar la creciente crisis de deuda y evitar que irrite más a los mercados financieros del mundo. Y trascendidos indican que a partir de mañana jueves, el jefe de Estado de Francia podría visitar suelo libio en una visita sorpresa a Tripoli y Bengasi, según reveló Le Figaro.