Mediante una declaración, los Estados miembros del bloque económico se declararon “convencidos que la solución a la crisis sólo podrá ser resuelta por los venezolanos” y convocaron “al Gobierno y a las fuerzas opositoras de la hermana República Bolivariana de Venezuela al diálogo, que permita una concertación política creíble”. El presidente de Bolivia, Evo Morales, fue el único que no firmó el documento. Con una fuerte defensa del gobierno de Nicolás Maduro, el mandatario acusó a Estados Unidos de estar detrás "un golpe" en Venezuela.
El texto, difundido por la Cancillería tras la sesión plenaria que se realizó en la fecha en el Hotel Intercontinental de Mendoza, agrega: "Los Estados Partes del Mercosur y los Estados Asociados de Chile, Colombia y Guyana, así como México, reiteran su profunda preocupación por el agravamiento de la crisis política, social y humanitaria en la República Bolivariana de Venezuela".
En ese contexto, "hacen un urgente llamado al cese de toda violencia y a la liberación de todos los detenidos por razones políticas, instando al restablecimiento del orden institucional, la vigencia del Estado de derecho y la separación de poderes, en el marco del pleno respeto de las garantías constitucionales y los derechos humanos".
Además "exhortan al Gobierno y a la oposición a no llevar a cabo ninguna iniciativa que pueda dividir aún más a la sociedad venezolana o agravar conflictos institucionales". También sostienen que "convencidos que la solución a la crisis sólo podrá ser resuelta por los venezolanos, instan al Gobierno y a las fuerzas opositoras al diálogo, que permita una concertación política creíble".
Finalmente, los países que participaron de la cumbre del Mercosur, que finaliza hoy en Mendoza, reiteraron "su plena disposición a acompañar ese proceso de diálogo entre venezolanos de la manera en que sus actores estimen más conveniente".