Sin mencionar quién es el enemigo, el ministro de Planificación, Julio de Vido, sostuvo hoy que "la Argentina está ganando la batalla por mayores recursos energéticos", lo que "permitirá tener un horizonte despejado y acompañar el crecimiento económico del país".
Al mejor estilo "Si quieren venir, que vengan, les presentaremos batalla" o "Tranquilos argentinos, que estamos ganando" de Leopoldo Fortunato Galtieri, tercer presidente de facto de la última dictadura militar que llevó al país a la Guerra de Malvinas, el ministro De Vido habló de una victoria del Gobierno en una "batalla energética" sin identificar a los perdedores.
De Vido remarcó al visitar obras de la Termoeléctrica Manuel Belgrano, en Campana, que "en marzo y abril de 2008 se incorporarán 400 megavatios al sistema cuando las dos turbinas de esta usina comiencen a generar a ciclo abierto, y a mediados de 2008 ocurrirá otro tanto con las dos turbinas de la planta de Timbúes", que se construye en esa localidad de Santa Fe.
A principios de 2009 estas dos usinas térmicas generarán a plena potencia de sus ciclos combinados (a gas y vapor) totalizando un aporte de 1.600 megavatios al sistema interconectado nacional.
Contra el fantasma de la falta de electricidad, remarcó que la oferta de energía "se incrementará en alrededor de 4 .000 megavatios hasta 2011, por la terminación de estas centrales, la finalización de (la nuclear) Atucha II (600 MVA), de (la hidroeléctrica) Yacyretá -que a fin de año aportará otros 200 MVA al alcanzar el embalse 79 metros-, y otros 1.600 MVA por la instalación de cinco generadoras térmicas en diversas zonas del interior, que se licitan a fin de octubre".
En otra pasaje destinado a la "batalla" que protagoniza el Gobierno vaya a saber con quién, el ministro advirtió que "pese a los agoreros, no hay hipoteca energética y sí obras encaradas para garantizar una oferta acorde con las necesidades del país".
Respecto de si se contará con el gas suficiente para generar en las dos usinas, De Vido afirmó que "esta garantizado", pero observó que "las plantas contarán con tanques reservorios de gas oil, que será usado como combustible alternativo a partir de junio, en caso de tener que priorizar el uso de gas para otros destinos, tal como ocurrió durante el invierno último".
Cada una de estas usinas requerirán 3,2 millones de metros cúbicos diarios de gas natural, que también podrá llegar vía el sistema de ductos a cargo de TGS, y por el futuro Gasoducto del Noreste (GNEA) que traerá gas desde Bolivia, se estima que a partir de 2009.
Fuente: DyN