José María Núñez Carmona, socio y amigo del vicepresidente Amado Boudou, debe presentarse este martes a las 11 en el juzgado federal 4 de Ariel Lijo a declarar como imputado por la causa de presuntas irregularidades en el salvataje de la imprenta Ciccone, tras dos convocatorias fallidas a indagatoria.
Si esta vez no llegase a concurrir a los tribunales federales de Comodoro Py 2002, el magistrado podría declararlo en rebeldía y disponer su detención, según lo que estableció el jueves pasado en su citación a indagatoria, siguiendo normas del Código Procesal.
Allegados a la defensa de Núñez Carmona informaron que hasta las últimas horas trabajaba con sus abogados, los hermanos Ramiro y Darío Rubinska, en la estrategia ante el juez Lijo. Una de ellas es la presentación de un escrito de descargo y negarse a contestar preguntas.
El juez Lijo acusó a Núñez Carmona de haberse quedado con Ciccone y de gestionar ante los dueños de la compañía las condiciones de la venta de la empresa. "Amado Boudou, junto a José María Núñez Carmona, habrían adquirido la empresa quebrada y monopólica Ciccone Calcográfica, mientras Boudou era Ministro de Economía, a través de la sociedad The Old Fund", explicó el juez Lijo cuando lo citó a indagatoria.
El socio y amigo de Boudou también fue vinculado directamente en la negociación y tratativas para el levantamiento de la quiebra de Ciccone Calcográfica por los dichos del también imputado y ex jefe de asesores de la AFIP Rafael Resnick Brenner.
Resnick Brenner declaró ante el juez que en 2010 "fui convocado al Ministerio de Economía a una reunión con el jefe de asesores doctor Guido Forcieri" y allí "me presentó al doctor José María Núñez Carmona (...) al cual dejó encargado en representación del Ministerio para el tratamiento del trámite". Núñez Carmona ya postergó en dos ocasiones su indagatoria: la primera vez porque estaba fuera del país y la segunda -la semana pasada- porque cambió de abogado.
El acusado compartía abogado con Boudou -Diego Pirota- pero el letrado renunció a continuar su defensa al día siguiente que el vicepresidente dijo en el canal "Todo Noticias" que tras el caso Ciccone la relación con su amigo se había enfriado y estaban distanciados.
Miembros de la familia Ciccone -Nicolás Tadeo Ciccone, ex dueño de la imprenta, y su yerno Guillermo Reinwick- declararon en la causa que estuvieron dos veces reunidos con Boudou, cuando era ministro de Economía, para hablar del rescate de la empresa y que éste le indicó que hablara con "su hombre de confianza", Núñez Carmona.
Incluso, Ciccone contó que Núñez Carmona había tenido "actitudes extorsivas" hacia ellos: "Si no le daba el 70 por ciento de la empresa iríamos a la ruina", dijo. Por ese tipo de hechos y en otro expediente, paralelo al principal, Núñez Carmona fue imputado por el fiscal federal Gerardo Di Masi del supuesto delito de "coacción" a miembros de la familia Ciccone mientras conversaban sobre la venta y rescate de la empresa que imprimía billetes para el Estado.
"Te lo voy a decir clarito: vos tocás al Vicepresidente y yo voy a tu casa de Pacheco y le meto un tiro a un hijo tuyo", habría amenazado el socio de Boudou, según Reinwick, en un encuentro que ambos habrían mantenido, en diciembre de 2012, en un barco amarrado en una guardería náutica.
Tras la declaración de Núñez Carmona, está prevista para el jueves la indagatoria de Forcieri, actual funcionario argentino ante el Banco Mundial, y así se cerrarán las exposiciones de los acusados. En la causa ya fueron indagados Boudou, Alejandro Vandenbroele, dueño de "The Old Fund" (que maneja la ex Ciccone), Ciccone, Reinwick y Resnick Brenner.