En 2014 hubo diputados que se llevaron más de $ 230 mil extras por canjear a efectivo los pasajes que no usaron durante el año. Con el aumento que definió esta semana la Cámara baja, en el que elevó los precios de referencia de cada pasaje, este año ese monto podría alcanzar los $ 480 mil.
El mecanismo es tan sencillo como polémico. Cada diputado (también los senadores) tiene a su disposición veinte pasajes aéreos y veinte terrestres por mes. Es algo necesario, tanto para los dirigentes del interior –para ir y volver a sus provincias, incluso con sus asesores– como para los porteños o bonaerenses, que por su actividad también se ven obligados a recorrer otros distritos. Sin embargo, promediando la década de los 90 se decidió que los pasajes que no fueran utilizados podrían ser canjeados por dinero en efectivo.
Según un informe que realizó la Fundación Directorio Legislativo, en 2014 cinco diputados no usaron ni uno de los pasajes, por lo que decidieron canjearlos todos. Así, se llevaron a su casa un total de $ 231.600 a lo largo de los 12 meses. En ese entonces, el valor de cada pasaje en avión era de $ 670, y en micro, de $ 295, cifras que claramente estaban por debajo del precio real. Ahora decidieron actualizarlo y llevarlo $ 1.350 y $ 650, respectivamente. Desde la fundación vienen reclamando las planillas correspondientes a 2015 y 2016, pero no obtuvieron respuesta de las autoridades de la Cámara de Diputados.
Los legisladores que en 2014 no usaron ningún pasaje y cambiaron todo a efectivo fueron: Gilberto Alegre (Frente Renovador), Graciela Giannettasio (FpV ), Carlos “Cuto” Moreno (FpV), Alberto Roberti (Frente Renovador) y Silvia Simoncini (FpV). Los cuatro primeros, bonaerenses, mientras que la última es de Santa Fe.
Pero la mayoría decidió canjear los pasajes por plata y sólo nueve diputados no se llevaron un peso (dos opciones: o no pidieron la plata o usaron todos los pasajes disponibles). En promedio, cada diputado recibió $ 132 mil extras ese año.
La decisión de aumentar los valores de los pasajes fue firmada esta semana por el presidente de la Cámara, Emilio Monzó, luego de un pedido de diferentes bloques. Incluía también el aumento del ítem “gastos de representación”, que subieron de $ 10 mil a $ 20 mil por mes. Ya el año pasado los legisladores habían intentado concretar este aumento, pero la presión social generó que en Diputados se frenara. En el Senado, en cambio, lo mantuvieron sin problemas.
Ahora, con el nuevo pedido de los diputados, la polémica se volvió a abrir, motorizada sobre todo por Néstor Pitrola, del Frente de Izquierda. Después se sumó también el Frente Renovador de Sergio Massa (ver aparte). Fuentes del Congreso, no obstante, aseguran que originalmente los miembros del Frente Renovador avalaban la medida y que ahora se oponen por oportunismo.
Además de los cinco que no usaron ningún pasaje, otros 28 diputados canjearon los pasajes que les sobraban por un monto superior a los $ 200 mil. Y hay para todos los gustos: desde las hoy oficialistas Elisa Carrió o Patricia Bullrich hasta los kirchneristas Diana Conti y Martín Insaurralde, pasando por Francisco de Narváez y Martín Lousteau.
Como si fuera poco, hay diputados que para viajar a sus distritos pueden usar autos de la flota oficial, por lo que les quedan todos los pasajes terrestres para canjear. Directorio Legislativo también pidió esa información, pero tampoco la consiguió.