Agentes de la Interpol detuvieron a un argentino en República Dominicana acusado de ser el nexo entre personas que trabajaban de “ mulas” y un grupo de narcotraficantes. Rubén Pérez reclutaba hombres rubios, bien vestidos y de procedencia en general alemana y holandesa para enviar a Europa Cocaína.
Según informó el diario Clarín, la investigación de Drogas Peligrosas de la Policía Federal ya lleva tres años y surgió de un alemán que fue detenido en 2006 en el aeropuerto de Ezeiza luego de haber hallado la Policía Portuaria dos kilos de cocaína en su valija.
Luis Gigena, integrante de Operaciones Federales, explicó al matutino que aquel entonces notaron que se trataba de “una verdadera organización dedicada al tráfico de drogas. La mayor parte se enviaba por la modalidad de mulas ingestadas".
La Policía cree que las “mulas” eran reclutadas en Europa y viajaban con destino Buenos Aires. Una vez aquí, se les entregaba la cocaína, que era traficada en cápsulas en el estómago de los hombres. La investigación llevó a allanar cuatro domicilios, ubicados en Tres de Febrero y San Martín, donde quedaron detenidos cinco argentinos y un dominicano conocido como "Joel". Rubén Pérez funcionaba como una de las cabezas de la organización según Drogas Peligrosas.