Mauricio Macri, jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, pidió que la asunción de Jorge Bergoglio como Sumo Pontífice, y su reunión con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, abra "una oportunidad de gran reconciliación nacional".
"Uno siempre piensa en el Papa como una figura tan especial, tan cercana a Dios, y de golpe que sea un argentino, que ha sido ejemplo de tantas cosas y que ha convivido... Compartamos esta alegría única, que nos tiene que reencontrar a todos los argentinos", proclamó.
El intendente, quien viajó al Vaticano para presenciar la entronación del Papa Francisco, dijo en diálogo con Radio Diez que "se ha levantado la Argentina a acompañar este orgullo de tener un Papa argentino, una enorme esperanza. Esperanza de que esto definitivamente marca un cambio de época. No es para menos. Es el hecho más importante que ha vivido nuestra historia en Argentina.
"Aparte, este Papa, como arzobispo de Buenos Aires, venía predicando hace diez años a favor de la concordia, del respeto, de la buena convivencia, de la unidad nacional Espero que todos los vivamos como una oportunidad de gran reconciliación nacional", completó Macri, quien luego recordó que con Bergoglio tuvo "una agenda intensa de trabajo en conjunto que nos permitió una linda convivencia y tener la oportunidad de recibir sanos consejos de parte de él".
Por su parte, el expresidente Eduardo Duhalde pidió "a Dios" que el encuentro mantenido entre la primera mandataria y el flamante líder de la Iglesia Católica permita mejorar la tensa relación que mantuvieron cuando Bergoglio oficiaba como arzobispo de Buenos Aires y los Kirchner evitaban asistir a sus Tedeums.
"Es necesario tranquilizarnos y empezar a pensar y actuar distinto todos", argumentó Duhalde, que acusó al Gobierno Nacional de crear conflicto en la relación con Bergoglio porque "no aceptan que otros hablen de temas que creen que les corresponde únicamente a ellos", como el de la "justicia social".
Consultado por la radio FM Vorterix sobre si la reunión entre Cristina y el Papa mejorará el vínculo entre ambos, el bonaerense replicó "Dios lo quiera, porque es necesario tranquilizarnos y empezar a pensar y actuar distinto todos".
"El Gobierno no acepta que otros hablen de temas que creen que les corresponde únicamente a ellos", opinó Duhalde. Luego sostuvo que Bergoglio es un hombre que, permanentemente, estaba hablando de la justicia social", y recordó que durante su presidencia, tras la crisis de 2001, "lo primero que hice fue enviar una carta al ahora papa Francisco y me contestó inmediatamente por teléfono".
"El 14 de enero (de 2002), se reinició así el Diálogo Argentino y fue lo que posibilitó que, en un momento tan difícil, empezáramos a entendernos y pudiéramos llevar adelante un gobierno patriótico de salvación nacional", concluyó.