POLITICA
Juicio a Von Wernich

El genocida que se compara con Jesucristo

Luego de compararse con Jesucristo en sus últimas palabras frente al tribunal, Christian Federico Von Wernich llamó a la reconciliación de los argentinos. Claro que lo hizo sin arrepentimiento previo ni reparación del daño como lo indica y exige la doctrina católica. Horas después, el peso de la ley se abatía contra él. Y lo hizo de una manera furibunda: descargando la máxima condena posible.

default
default | Cedoc

De esta manera, el ex capellán de la policía bonaerense comandada por el inefable general Ramón Camps se convertía, así, en el primer miembro de la Iglesia Católica de América Latina en ser condenado por delitos de lesa humanidad. Y allí radica el valor histórico de esta jornada lluviosa que se registró hoy en La Plata.

Más allá de las chicanas judiciales interpuestas a último momento, el juicio demostró la participación de Von Wernich en el engranaje represivo de la última dictadura militar y no dejó lugar a dudas sobre su actuación en los distintos centros clandestinos de detención del llamado circuito La Plata, es decir, la comisaría quinta y octava, la Brigada de Investigaciones, Puesto Vasco, Arana y COT1 Martínez, entre otros. Allí, Von Wernich fue visto por decenas de testigos –que hablaron durante estos tres meses de juicio oral- y los jueces pudieron comprobar la relación que establecía con los detenidos desaparecidos.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

Desde las cargadas del ex capellán a Luis Velasco –testigo que la Defensa intentó ensuciar de forma grotesca- hasta las interminables charlas con Osvaldo Papaleo, Analìa Maffeo, Juan Ramón Miralles, y Rubén Schell, entre otros, en las que intentaba extraerle información y les inculcaba el más terrible de los suplicios: el tormento de la esperanza, como relataron varias víctimas. Y de más está recordar el caso del llamado Grupo de los Siete, esa experiencia macabra de “recuperación” de militantes que, tras haberse quebrado y colaborado con las fuerzas represivas, fueron asesinados en un descampado.

 
Pero lo cierto es que la condena a Von Wernich abre, ahora, un serio debate sobre la complicidad de las jerarquías de la Iglesia Católica durante la última dictadura militar. He allí, también, su importancia histórica. Sólo resta esperar, ahora, la decisión de la actual conducción del Episcopado respecto de la situación del ex capellán. El documento de repudio parece ya inevitable. Queda ahora conocer los términos y las posibles sanciones canónicas que pesen sobre el condenado. Y resta saber si la Iglesia, como exigió el cardenal Jorge Bergoglio el domingo abrazará definitivamente la verdad histórica.

*Autor de Maldito tú eres. El caso Von Wernich, Iglesia y represión ilegal. Editorial Marea, 2003.