El ministro de Justicia, Germán Garavano, reveló que "está analizando" junto al secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, la decisión de la Justicia jujeña de regresar a la jefa de la Tupac Amaru, Milagro Sala, al penal del barrio de Alto Comedero. La dirigente, que cumplía prisión domiciliaria, fue llevada de vuelta a la cárcel esta mañana tras pasar 45 días encerrada en su casa de la localidad de El Carmen.
El funcionario despegó a los gobiernos nacional y provincial de esta decisión del magistrado Pablo Pullen Llermanos, al advertir que "es un juez independiente que toma una decisión en el marco de sus competencias".
Desde la localidad bonaerense de Moreno, donde participaba de un timbreo de Campaña de Cambiemos, el ministro sostuvo que el Gobierno tomó conocimiento este sábado del traslado de Sala, por lo que estaba "analizando la situación" junto al secretario de Derechos Humanos. "Veremos cuál fue la situación que generó esto y la evolución", añadió Garavano en declaraciones a radio Mitre.
Consultado sobre cuáles serían los pasos a seguir si el Gobierno determina que se trató de una "decisión equivocada" de la Justicia, respondió que "ni en el Ministerio de Justicia, ni el Estado nacional, ni provincial tendrían injerencia en la decisión de un juez". Pero, aseguró que de ser así "se harían presentaciones a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y al poder judicial de la provincia si hay una situación irregular".
