Mientras la crisis ya golpea a varias empresas y hace peligrar los puestos de trabajo, el Gobierno ya definió cuál será el promedio de aumentos salariales para las negociaciones paritarias de 2009.
En los últimos años, el kirchnerismo mantiene la idea de que los aumentos salariales deben ser unos cinco puntos porcentuales más que la inflación. Como se prevee que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) para 2009, medido por el INDEC, sea del 8%, las subas salariales serán del 12% en promedio, con un techo de 13,5%.
La cifra surge por cálculos cruzados entre los ministros de Trabajo, Carlos Tomada, de Producción, Débora Giorgi, y de Economía, de Carlos Fernández, junto a la jefatura de Gabinete de Sergio Massa, y ya cuenta con la aprobación de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, según el diario Ámbito Financiero.
Cabe destacar que este cálculo se abandonó en 2007 y 2008, cuando Guillermo Moreno irrumpió en el INDEC y comenzó a manipular los índices de inflación. Entonces, el titular de la CGT, Hugo Moyano, negoció los aumentos tomando como referencia un cálculo inflacionario propio, basado en los aumentos de los supermercados. Por estos días, el líder camionero insiste en reclamar un plus salarial de entre 200 y 500 pesos para compensar la inflación de mitad de año.
Ahora se espera que en 2009 ocurra lo mismo que en años pasados: que Hugo Moyano se reúna con el Gobierno junto a otros líderes sindicales, -taxistas, constructores, plásticos, bancarios, entre otros- para acordar ese tope salarial de cara a las próximas negociaciones paritarias.
El Gobierno tiene especial interés en lograr un acuerdo con los tres sectores más afectados por la crisis: los automotrices, la siderurgia y los bancarios, que sufren la incertidumbre por la posibilidad de despidos, cierres y congelamiento de sueldos.
Eso es precisamente lo que busca evitar la CGT: " Acá hay que sostener pilares básicos que son nuestro límite: fortalecer el empleo y el poder adquisitivo del salario. En esos dos pilares se sustenta la actividad económica", afirmó Héctor Daer, secretario de prensa de la central obrera.
Recién reelecto como líder de la Asociación de Trabajadores de Sanidad de Buenos Aires (ATSA), Daer sostuvo que la CGT apoya las últimas medidas del Gobierno, que buscan reducir el impacto de la crisis y preservar los puestos de trabajo.
"Por eso pretendemos participar y opinar en la discusión de las políticas nacionales, porque si garantizamos que esas políticas son las más adecuadas, los trabajadores no sufriremos, como venimos sufriendo crisis tras crisis desempleo, caída del salario, caída del gasto público y en definitiva una menor calidad de vida. En este momento estamos pensando y opinando desde la CGT para que esto se de en un proceso inverso", declaró en una entrevista con el diario El Cronista Comercial.