El gobierno buscará ex represores con la base de datos de la Policía Federal

Los ánimos están caldeados en la Policía Federal. El gobierno nacional decidió quitarle a la fuerza el poder de elaborar las cédulas de identidad y los pasaportes, una decisión que causó un previsible malestar. Es que, además del recorte presupuestario, la Policía perderá el control sobre la información de todas las personas que realizan esos trámites.

Y eso no es todo. Según informó Ámbito Financiero, uno de los principales objetivos del kirchnerismo es acceder a los archivos de la Federal con información de la identidad de personas que participaron de la represión durante la última dictadura militar. Muchos desde el gobierno creen que miembros de la fuerza tienen identidades falsas para evitar ser juzgados por crímenes de lesa humanidad.

La Federal ve así con malos ojos el recorte de poder, tanto político como económico que se dieron desde la llegada de Nilda Garré a la cartera de Seguridad: primero sacaron del medio al jefe de gabinete Aníbal Fernández, con buena relación con la plana principal. Ahora le quitarán la administración de los pasaportes y cédulas.

Personal. Hasta el momento hay unas 300 personas (civiles y uniformados) que trabajaban elaborando la documentación. Los trámites y el personal a cargo de realizarlos, pasarán a la órbita del Ministerio  del Interior, el nuevo encargado de los pasaportes, según informaron fuentes que trabajan actualmente en estas tareas. En cifras, la Federal obtenía unos cuatro millones de pesos por año, un 20% del negocio.