El Gobierno anticipa una mejora de las exportaciones para recomponer las reservas, algo que por estacionalidad no comenzaría a pasar hasta diciembre. Sin embargo, la incertidumbre sobre el tipo de cambio y el acceso al dólar, presiona sobre las ventas al exterior y quienes especulan con una devaluación, demoran las ventas a la espera de una mejora en los márgenes de ganancia por el tipo de cambio. En ese marco, se plantea la necesidad de que haya incentivos y controles para asegurar las divisas que la economía necesita.
La evolución del comercio exterior es peor a la esperada inicialmente, considerando la reactivación que tuvo la actividad a partir de mayo, según detalla un análisis de la consultora LCG. “No esperamos que en los próximos meses haya una importante mejora en las exportaciones de manifacturas de origen industrial, aunque productos primarios y manifacturas de origen agropecuario podrían comenzar a mejorar en el margen, explicado principalmente por una mejora en el precio de la soja y un incremento en la demanda China en línea con la recuperación que se está observando en el país asiático”, plantean los economistas.
Balanza. De acuerdo con los últimos datos del Indec, que esta semana publicó el Intercambio Comercial Argentino (ICA), la caída en las importaciones fue superior a la de las exportaciones en agosto y el superávit comercial marcó una suba del 22,9%. De esa forma, acumula en los últimos doce meses un récord de US$ 19.221 millones, planteó un análisis de la Cámara de Exportadores (CERA), que advierte, sin embargo, que es posible que ese superávit disminuya en los próximos meses.
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Esto se debe a que “los productos esenciales -los de menor caída- tienen una menor participación en las exportaciones del último cuatrimestre y que, al flexibilizar las restricciones a la circulación, las importaciones debieran comenzar a recuperarse en conjunto con la actividad”.
En tanto, los economistas plantean que la falta de certidumbre sobre las medidas y la economía genera ruido en las exportaciones.
Por otra parte, las exportaciones industriales en lo que va del año representan apenas un 22% del total. “De mantenerse este nivel y asumiendo una caída de las ventas al exterior del 12% en 2020, las manufacturas de origen industrial finalizarían el año representando el 22%, lo que significa un mínimo histórico que se ubica muy por debajo del 32% promedio que representaron en los últimos 15 años”, agregó LCG.
“Dada las recientes medidas para contener la pérdida de Reservas Internacionales y la menor oferta de dólares que existe estacionalmente durante el segundo semestre hemos recalculado nuestras estimaciones de importaciones de cara a los próximos meses en torno a los US$ 3.400 a US$ 3.600 millones”, indicaron desde ACM, que marca una divergencia entre el resultado de la balanza comercial y el resultado en el mercado de cambios (menor superávit) producto de pago de deudas comerciales y pago de obligaciones financieras privadas.
