POLITICA
SECUELAS DE LOS SAQUEOS

El intendente de Bariloche decide su renuncia bajo enorme presión K

Goye se negó a viajar a Viedma y el gobernador Weretilneck y el senador Pichetto lo fueron a buscar para alejarlo del cargo. Un "intercambio jugoso" en el que no se habló directamente de la dimisión.

Weretilneck y Pichetto en la reunión en que le pidieron la renuncia a Goye.
| DyN

El intendente de San Carlos de Bariloche, Omar Goye consiguió hoy en apariencia unos días de respiro para evitar dar un paso al costado al frente de la comuna, tras el pedido al respecto que le habrían hecho el gobernador de la provincia, Alberto Weretilneck y el senador rionegrino Miguel Pichetto.

El gobernador consideró, según informó Télam, que el "aislamiento, de él (Goye) y el gobierno municipal, viene de hechos anteriores a los saqueos de diciembre", y consideró que debe alejarse "por el bien de Bariloche".

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En declaraciones brindadas al canal TN después de la reunión, el mismo Goye se mostró sorprendido de haber escuchado la palabra "renuncia" en las conferencias de prensa que habían dado el gobernador y el senador. En la reunión, "nunca se habló del termino renuncia, pero sí se analizó una salida insitucional que beneficie a la ciudad".

"Por respeto a la comunidad que eligió a este intendente en comisios libres, me voy a tomar un tiempo prudencial", añadió el funcionario municipal. Además recalcó que el "aislamiento" ha sido en los últimos quince días con el gobierno provincial. "Con el Gobierno nacional seguimos gestionando algunas cuestiones de fondo y de fondos", dijo.

Según relató Goye, mantuvo "un intercambio jugoso" con el goberandor Weretilneck por los incidentes con saqueos. "Todo apunta a que según el gobernador yo soy el responsable de los saqueos".

En declaraciones a Noticiero Seis, Goye señaló que "en estos días se está hablando de golpe institucional y de cuestiones que traen muy malos recuerdos a la gente y principalmente a los barilochenses. Como humano uno tiene la posibilidad de rectificar algunos rumbos y nosotros estamos trabajando para que la ciudad empiece a cambiar algunos paradigmas que la tienen postrada desde hace muchos años y no solo desde el gobierno de Goye".

En un comunicado que dio a conocer la gobernación luego del encuentro, se señaló que el intendente Goye "se comprometió a evaluar las alternativas y a ofrecer una respuesta en los próximos días para definir la situación".

La reunión no pudo realizarse ayer, ya que Goye se negó a viajar a Viedma y el gobernador y el senador del Frente para la Victoria viajaron a su comuna en lo que se consideró una suerte de emplazamiento, tras los incidentes de la última semana de diciembre que dispararon los saqueos en otros puntos del país.

El parte oficial también precisó que durante la reunión, de más de una hora de duración, se "analizó detalladamente la situación política, social e institucional de Bariloche" y las "consecuencias municipales, provinciales y nacionales que arrojó".

El comunicado dijo también que "luego de evaluar el panorama y las posibles alternativas para superar la crisis, el intendente Goye se comprometió analizar lo revisado en el encuentro y a brindar una respuesta en los próximos días para definir la situación".

Recambio democrático.  En el aeropuerto local, de regreso a Viedma, el senador y el gobernador de la provincia pidieron que se sigan los "caminos institucionales" para producir el recambio, tras la situación derivada de los saqueos de fines de diciembre.

Aún antes de los disturbios, que luego se replicaron a nivel nacional, la relación del intendente con el gobernador no pasaba por su mejor momento y fueron muchos los cortocircuitos políticos del último año que dejaron aislado al jefe comunal, quien habitualmente se recostaba en Pichetto.

Sin embargo, el senador -quien el próximo año aspira a su reelección o al cargo de gobernador en 2015- fue particularmente duro con Goye: "una salida acordada y ordenada”, no implica un acto “anti-institucional o antidemocrático”, dijo Pichetto según el portal de la Agencia de Noticias Bariloche (ANB).

“Bariloche necesita un intendente fuerte, que lidere el gobierno”, señaló Weretilneck y agregó que “eso se consigue con los votos del pueblo”.

Frente a la prensa, Weretilneck y Pichetto evitaron avanzar sobre la posibilidad de consensuar candidatos, en caso de que Goye renuncie y se llame a elecciones en 90 días o el Concejo defina impulsar una revocatoria de mandato: “Sería un error adelantarse a esos hechos. Estamos hablando de la institucionalidad de Bariloche”, coincidieron.