La sublevación de más de mil policías en Quito, Ecuador, convulsionó al país y puso en estado de alerta a toda América después de que incluso internaran al presidente Rafael Correa.
En este marco, el secretario general de la UNASUR, Néstor Kirchner, envió su solidaridad y aseguró que "Sudamérica no puede tolerar bajo ningún aspecto que los gobiernos elegidos democráticamente se vean vistos presionados y amenazados por sectores que no quieren perder privilegios y prebendas".
En diálogo con Perfil.com, Juan Battaleme, analista en política internacional de la Universidad Argentina de la Empresa (UADE), aseguró que “en primer lugar, debería estar viajando en las próximas horas y convocando una reunión porque es la condición democrática y el rol de UNASUR será importante mientras esté amenazada la democracia”.
En este sentido, explicó que "en esos casos la diplomacia presidencial ha funcionado, las cumbres de presidentes han funcionado”. Sobre la crisis en el país, Battaleme observa “en la actitud de Rafael Correa (ánimos) de utilizar la crisis para de plebiscitar su mandato. Muy tempranamente, se puede ver este juego: en definitiva, juega a todo o nada". El analista agregó que "el rol de las Fuerzas Armadas sigue siendo central en Ecuador”.
El Battaleme recordó que parte de la alianza de Correa para llegar al poder fueron las Fuerzas Armadas: "fueron ellas las que destituyeron a otros presidentes" y precisó que no son las únicas fuerzas que se alzaron contra el presidente: "en efecto, hay que hablar de la seguridad doméstica, que es la policía, que el grueso de este alzamiento”, destacó.
Al mismo tiempo, indicó que habrá que ver cómo evoluciona la crisis ecuatoriana. "Esto es ‘yo no retrocedo y ellos no retroceden’, y es grave en la medida que ninguno de los dos quiera retroceder. Correa fue a pedir que alguien le pegue un tiro. En el norte de América Latina el peso de las Fuerzas Armadas es fundamental. Todavía siguen siendo un elemento de referencia en la sociedad, sin ir más lejos en Venezuela y Perú. Y en Colombia, son un orgullo nacional; en Chile, son muy importantes; y en Bolivia, Evo Morales se lleva muy bien con las Fuerzas Armadas”, destacó.