POLITICA
se define el futuro de eduardo freiler

El macrismo negocia contrarreloj para destituir a un juez ligado al kirchnerismo

Esta semana, el Gobierno sumará presión en el Consejo de la Magistratura para conseguir los votos e iniciar un juicio político al camarista, acusado de enriquecimiento ilícito.

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Freiler. En Cambiemos confían en contar con los votos necesarios para impulsar su salida. | Nestor Grassi
El futuro del juez federal Eduardo Freiler se podría resolver la semana que viene. El oficialismo tratará de aprobar el lunes el dictamen en el que lo acusa de enriquecimiento ilícito, con la firme intención de empujarlo a un juicio político el jueves.

En un texto de 200 páginas, Cambiemos señala distintas inconsistencias en el patrimonio del magistrado y pide que, mediante el proceso correspondiente, el juez sea destituido. Pero el Gobierno no dará un paso en falso. Si no tiene los votos, ni siquiera someterá el asunto a consideración en el Consejo de la Magistratura.

El diputado y consejero que lleva la acusación, Pablo Tonelli, está confiado. Aseguró a su entorno que tiene los nueve votos necesarios para avanzar con el proceso. Eso implicaría que Jorge Daniel Candis, que representa al Frente para la Victoria, resolvió apoyar al oficialismo.

Desde que el kirchnerismo dejó la Casa Rosada, Candis tuvo un comportamiento sinuoso. Acompañó algunas iniciativas del PRO y otras las rechazó. Para sus compañeros del FpV, esta votación será bisagra: la eventual destitución de Freiler es emblemática, porque el Ejecutivo podrá demostrar allí cuál es su poder de fuego a la hora de sacar y poner jueces. Freiler es identificado por la Casa Rosada como un juez K, que ocupa un cargo clave.

“No tengo una posición tomada”, le confesó a sus íntimos Candis en las últimas horas. En la semana, sin embargo, le prometió al ex secretario de Justicia Julián Alvarez que no votará en contra de Freiler. Lo mismo hizo en una comunicación con el jefe de la bancada kirchnerista de Diputados, Héctor Recalde.

Los representantes de los jueces, Leónidas Moldes y Luis Cabral, tienen resuelto que, si el tema se trata el lunes en la Comisión de Disciplina, ellos llevarán un dictamen acusatorio propio, porque tienen diferencias en algunos puntos. De todos modos, eso no complicará la estrategia de Cambiemos.

En el kirchnerismo ponen en duda que Moldes termine votando en contra de Freiler porque es un colega, y porque, más allá de que los cargos sean serios, implicaría abrirle la puerta al Gobierno a otras embestidas. Sin embargo, Cambiemos sostiene que el representante de los jueces en el Consejo está convencido de que hay que destituirlo. La confianza en el PRO es mucha: ya llamaron a Diana Conti para decirle que la situación de Freiler se resolvía la semana que viene. Conti es una de las que integrarán el jurado de enjuiciamiento si el proceso avanza.

La oposición tembló esta semana cuando el juez Enrique Lavié Pico resolvió que otro representante K en la Magistratura, Ruperto Godoy, tendría que abandonar su cargo por no ser abogado. Pero ayer al mediodía el mismo juez le concedió una apelación con efectos “suspensivos”. Es decir que hasta que no resuelva la Cámara de Apelaciones, seguirá en el puesto. Si se iba Godoy, al oficialismo le alcanzaba con ocho votos para destituir a Freiler. Igual, si el oficialismo no avanza esta semana, lo hará cuando consiga el consenso. Algo es seguro: del juez no se van a olvidar.

Entre el año pasado y éste, el oficialismo presionó a cinco jueces para que se vayan y lo logró. Entre ellos estaba Norberto Oyarbide, quien, ante la amenaza del jury, dimitió.