El ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, Anibal Fernández, deberá ratificar o rectificar la denuncia que hizo pública ayer ya que fue querellado hoy por presuntas calumnias e injurias a raíz de haber vinculado al Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) con los incidentes de trenes y ataques a estaciones en Castelar y Merlo.
Fuentes judiciales confiaron a la agencia de noticias DyN que los querellantes son los dirigentes del MST Vilma Ripoll y Gustavo Giménez, que radicaron su presentación en el juzgado en lo correccional dos a cargo de la magistrada Graciela Angulo, y plantearon que el ministro sea citado a esa sede judicial.
"Aníbal Fernández se refirió de modo malicioso, falaz e intencional afectando el buen nombre de nuestro partido que siempre pregonó el derecho de los usuarios de ferrocarriles en forma digna, como el de los empleados a contar con condiciones de seguridad", señalaron, al tiempo que le achacaron haber tildado "a nuestra organización y sus militantes de delincuentes, vandalos, y saboteadores".
Para los dirigentes, Fernández quiso "desviar la verdadera drazon del conflicto" y reiteraton que "estos hechos han sido el producto de una espontanea manifestación popular ante la gran indignacion que provocada en los usuarios de dicha línea ferroviaria el constante mal funcionamiento de la misma".