Desde Córdoba
El narcoescándalo se transformó en el tema excluyente de la recta final de la campaña electoral en Córdoba. La causa que mantiene presos a seis altos mandos de la división Drogas Peligrosas y que les costó el puesto a la cúpula policial y al ministro de Seguridad dominó el escenario político a una semana de las elecciones del 27 de octubre.
En la última semana, todas las miradas se enfocaron en la muerte de la policía Damaris Roldán. La joven que trabajaba en el área Comunicaciones de la Policía controlando las cámaras de vigilancia públicas apareció muerta de un tiro en la boca en la vía pública.
Beatriz Bringas, madre de la víctima, descarta la hipótesis del suicidio. “Mis hijos llegaron al lugar del hecho, pero no los dejaban acercarse. Uno de ellos la vio con el arma en la mano derecha, pero ella era zurda. Recién después apareció con el arma en la mano izquierda”, señaló.
La mujer aseguró que Damaris no era una persona que presentase cuadros depresivos, y señaló que su hija aún amamantaba a una pequeña de sólo un año, por lo que no tenía motivos para quitarse la vida.
En medio de este panorama se enmarcan los últimos tramos de la campaña electoral. Mientras, el gobierno de José Manuel de la Sota busca hacer pie. La representante del kirchnerismo en Córdoba, Carolina Scotto, parece haber obtenido los mejores dividendos y según las últimas encuestas conocidas, la ex rectora de la Universidad Nacional registró un crecimiento de más de dos puntos respecto a las PASO y se ubicaría en el tercer lugar, superando al candidato del PRO, Héctor Baldassi. El ex árbitro se mostró incómodo e inseguro en los últimos debates públicos, y eso afectaría la buena performance conseguida en agosto que lo transformó en la “revelación” de los comicios.
En los primeros lugares nada cambiaría respecto de las primarias, y Juan Schiaretti (PJ) y Oscar Aguad (UCR) mantendrían sin problemas el primer y segundo lugar respectivamente, pero la distancia entre ambos se achicaría algunos puntos.
El miércoles pasado, en la Universidad Nacional de Córdoba, los candidatos se vieron las caras en el debate más importante de toda la campaña.
Allí todos hicieron referencia al narcoescándalo, con excepción del candidato del justicialismo, Juan Schiaretti. Antes del debate, el gobernador José Manuel de la Sota había dicho que le parecía “canallesco” que se utilizara electoralmente. En la misma jornada, se realizó en la capital provincial una marcha bajo el lema “Basta de narcopolítica”, a la que se dieron cita más de mil personas.
La convocatoria fue impulsada por el periodista Tomás Méndez, quien a través de su programa ADN destapó el escándalo al denunciar el presunto vínculo entre miembros de la División Drogas Peligrosas de la Policía provincial con narcotraficantes. Méndez se mostró preocupado frente a la prensa y aseguró: “Tengo pruebas de que acá va a haber problemas, hay riesgo de vida. No tenemos respaldo de ningún lado. Ni de la provincia, ni de la Municipalidad ni de ninguna autoridad gubernamental o institucional”.
La causa sobre presuntos vínculos que conectarían a la División Drogas Peligrosas de la Policía de Córdoba con el narcotráfico sigue ofreciendo nuevas aristas.