POLITICA

El regalo navideño de Cristina para contener a los sindicatos

La eliminación de ganancias en el aguinaldo era un reclamo de todos los gremios, y acercaba a la CGT oficialista con los opositores Moyano y Barrionuevo.

Cristina anunció que los que ganen menos de $35 mil no pagan ganancias en diciembre.
| DYN

El discurso de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner ante la Conferencia anual de la Unión Industrial Argentina (UIA) corría por los carriles habituales de defensa del modelo. Hasta que, de imprevisto, la mandataria anunció que los trabajadores que ganen menos de $35 mil pesos no pagarán el impuesto a las ganancias sobre el aguinaldo que perciban en el mes de diciembre.

Fue una medida inesperada, pero que venía siendo un reclamo permanente de todos los sindicatos, oficialistas y opositores. Ambos pedían cualquier alivio que sirviera para llegar a diciembre con un poco más de aire ante los reclamos de sus bases, como un “bono” de fin de año o la misma suba del mínimo no imponible.

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Los gremios amigos de la Casa Rosada, encabezados por la CGT de Antonio Caló habían perdido las esperanzas. Sobre todo, porque en los últimos discursos, CFK se mostraba contraria a la medida. Incluso ante la UIA, al mismo tiempo que anunciaba la exención para el aguinaldo, cuestionaba a quienes piden cambios en el impuesto a las ganancias. “No nos dicen cómo vamos a financiarnos”, expresó. Sin embargo, al cruzarse con los representantes de los trabajadores del sector, se le pidió que, al igual que ocurrió el año pasado, exceptúe el aguinaldo del impuesto. Ella no negó esta posibilidad.

Lo que terminó de decidir al gobierno fue el acercamiento que el reclamo había provocado entre los sindicatos opositores y oficialistas. Y la posibilidad de que Hugo Moyano y Caló caminen hacia una posible unidad sindical. La idea de gremios unidos para las paritarias de 2015 sería una pesadilla para el kirchnerismo en un año electoral.

En los últimos meses, los gestos de la central opositora fueron correspondidos por el sector más afín al kirchnerismo. El propio Caló, Gerardo Martínez (Uocra) y el nuevo secretario general de Luz y Fuerza, Guillermo Moser, habían llegado a destacar que la unidad también es un objetivo de la CGT oficial.

A su vez, semanas atrás, la CGT de Antonio Caló pidió al Gobierno a resolver la cuestión del gravamen antes del 4 de diciembre, cuando reunirá su cúpula directiva, y se advirtió que en caso de no haber un alivio inmediato en el impuesto y un cambio integral el año que viene, “la próxima ronda de paritarias se saldrá de control”.  

Hugo Yasky, líder de la CTA oficialista, también se había sumado al pedido y mencionó que sería "un error rotundo” que “se volverá en contra del Gobierno". Tras esto, gremios del transporte, oficialistas y opositores, se sumaron a medidas de fuerza.

El pasado lunes, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, había rechazado la posibilidad de exceptuar del medio aguinaldo de diciembre el cobro del Impuesto a las Ganancias. En aquella oportunidad, el funcionario había asegurado que el gravamen es “necesario filosófica e ideológicamente”.

“Cerca de 10 millones de trabajadores o personas físicas están excluidas”, subrayó Capitanich y calculó: “En la comparación 2002-2014, a excepción de algún período que implicó afectar a cerca del 30% de las personas físicas, ahora es equivalente al 10,4“.