El viaje iba a ser una suerte de revival ampliado del que en 2007 hicieron Luis D’Elía, Mario Cafiero y el padre Luis Farinello. A la lista se sumarían Mario Secco (intendente de Ensenada), Milagro Sala (Tupac Amaru), Fernando Esteche (Quebracho), la diputada Alicia Sánchez (esposa de D’Elía), Jorge Rachid (Soberanía y Liberación) y un empresario. Invitación del gobierno iraní “en el marco del aniversario de la Revolución Islámica”. Los consultados fueron en una primera instancia reacios a hablar del tema.
El líder de la FTV no pudo ser ubicado pese a los innumerables mensajes y llamados de PERFIL. El viernes partió a Bruselas para participar junto a Gabriel Mariotto de unas presentaciones de la Ley de Medios. Mariotto hablará de la norma y los dictámenes del Parlamento europeo, tomados como referencia y “Luis, de la participación de las organizaciones en la previa de la Ley”, dijeron cerca del funcionario. La invitación al dirigente social viene del lado de Giulietto Chiesa, europarlamentario y jefe de la revista italiana Cometa. Luego seguirá a Irán.
Más allá de las motivaciones personales que cada uno podía tener para aceptar o no el convite, y la intención iraní de juntar dirigentes afines, fuentes que conocen a D’Elía afirman que “él tiene sus intereses y amigos empresarios que representar” en Irán. De ahí la importancia del hombre que viaja en la delegación y que sería, según la fuente, “el Graiver del Gordo”. La representación diplomática iraní se negó a dar la lista de los que viajarían el viernes en un vuelo de Alitalia.
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