“Con Sergio nunca sabés qué puede pasar. Cuando cerrás algo, el último día te cambia todo”. Con gran escepticismo, en el gobierno de María Eugenia Vidal no tenían claro, al cierre de esta edición, cuál era la decisión final pero ya observaban que podía terminar con el kirchnerismo. Con el viaje de Vidal a Colombia, para reuniones vinculadas a la lucha contra el narcotráfico, la relación con Massa y sus operadores quedó en manos del jefe de Gabinete bonaerense, Federico Salvai.
El creador del Frente Renovador había empezado a explorar, hace diez días, un acuerdo con el oficialismo para llevar a la gobernadora como candidata en su boleta a presidente. A cambio, en las primeras charlas, ya se habían comentado líneas de acuerdo. El oficialismo estaba dispuesto a abrir las listas de diputados y senadores provinciales, a bajar el candidato del macrismo en Tigre (el actor Segundo Cernadas) y apoyar a Malena Galmarini para ese municipio –Massa detesta a Julio Zamora, el intendente actual cerró con Unidad Ciudadana –. También se había barajado que en varios municipios, como Chascomús o San Fernando, se les despeje la candidatura a los intendentes renovadores.
Sin embargo, los mensajes de los colaboradores de Massa y del propio ex alcalde nunca terminaron de ser contundentes. Y no hubo acuerdo.
La novedad, en todo caso, había sido que el mismo presidente Mauricio Macri y su jefe de Gabinete, Marcos Peña, decidieron avalar la jugada de Vidal de llevar otros candidatos a presidente en su boleta para potenciar a la gobernadora en su difícil lucha por retener la Provincia frente a la dupla Axel Kicillof-Verónica Magario. Una muestra, además, de que la idea de desdoblar las elecciones provinciales de las nacionales que había lanzado Vidal en diciembre, lejos de ser una locura, era una buena salida ante la complicada situación para el oficialismo en el distrito que representa el 38% del electorado nacional.
En este contexto, ¿repercutiría negativamente en la aspiración de reelección de la gobernadora que Massa termine con el kirchnerismo? En el oficialismo no hay una respuesta única. Los más realistas aseguran que puede complicar aún más en muchos distritos en los que el tigrense le sacó votos al kirchnerismo. Otros oficialistas afirman que el voto massista podría migrar a otras opciones, incluidas el macrismo, pero que el porcentaje de votantes que podría terminar con CFK es mínimo.
Especulaciones aparte, en el vidalismo analizaban si sostener otros candidatos a presidente que quieran llevar a Vidal en la boleta. El caso más paradigmático: Juan Manuel Urtubey, amigo personal de Salvai, también salteño. El único candidato vetado por la Rosada fue Roberto Lavagna, quien tendrá que ungir un postulante propio. Vidal y Urtubey tienen un buen diálogo y estuvieron varias veces cara a cara, con Salvai como mediador.
Gira por Colombia
En el marco de la visita oficial, la gobernadora María Eugenia Vidal y el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, se reunieron ayer con el director general de la Policía Nacional de Colombia, Oscar Atehortúa. También estuvo presente el viceministro de esa cartera bonaerense, Vicente Ventura Barreiro. La mandataria viajó “con el objetivo de interiorizarse sobre la lucha contra el narcotráfico que lleva adelante el país sudamericano, compartir buenas prácticas en ese campo y fortalecer los lazos de cooperación y trabajo en conjunto en materia de seguridad”, explicaron fuentes oficiales. Durante su estadía en Colombia, Vidal mantuvo un encuentro con el presidente, Iván Duque Márquez.