El ex ministro de Justicia del gobierno de Néstor Kirchner, Alberto Iribarne, expresó su apoyo incondicional al ex Procurador General Esteban Righi, al tiempo que criticó con duras palabras al vicepresidente Amado Boudou. Asimismo, fustigó a la administración de Cristina Fernández de Kirchner al calificarla como "poco coherente".
En diálogo con Radio La Red, Iribarne se mostró sorprendido con la partida del jefe de los fiscales: "Creo que es un retroceso, porque la cualidades y las condiciones éticas, intelectuales y profesionales de Esteban Righi eran enormes".
Y apuntó "Ese punto de inflexión que hubo en la historia de la justicia argentina con la designación de la nueva Corte y con la designación de Righi como Procurador General me parece que está experimentando un retroceso importante". "Estoy seguro que Righi va a hacer su defensa formalmente y va a demostrar que es absolutamente falso todo lo que se le imputa".
"El vicepresidente Boudou tiene una cara de hierro y el procurador Righi tiene otros valores", asestó Iribarne. "Boudou no ha contestado a ninguna de las imputaciones. En lugar de aclarar los hechos se ha decidido por largar una serie de acusaciones como fue su declaración a la prensa del día jueves contra numerosos actores".
Y subrayó: "Cara de piedra, digo, porque no aclara su situación. Respecto de los hechos que se le imputan o en los que está involucrado, él no hace ninguna aclaración. Creo que debería haber pedido una licencia al menos, o aclarar toda la situación. Debería haber dicho que no tenía contacto con gente como Vandenbroele, gente que ha tenido tanto éxito".
El rol del Gobierno actual. "Esta administración se ha empeñado en tener una actitud bélica con distintos sectores Y en una guerra la primera víctima es la verdad. Entonces, comienza a ser todo mentira. Estamos en una espiral peligrosa que a mí me gustaría que se detuviera, en donde no se puede contradecir al superior, en donde no se puede hablar con el 'enemigo'", afirmó el ex funcionario K.
Por último, apuntó: "Hay diferencias con el Gobierno de Néstor Kirchner. Yo creo que ahora se está avanzando demasiado precipitadamente y a tontas y a locas. Por ejemplo, en materia de transporte y energía. Se están tomando decisiones primero para un lado, luego para el otro. Se anuncia un ajuste en diciembre para Aerolíneas Argentinas y meses después se anuncia que está bárbaro. Kirchner tenía otro modo de ver las cosas y de ir con un poco más coherencia".