La Fiscalía de Investigaciones Administrativas (FIA) decidió poner la lupa sobre áreas particularmente sensibles en un año electoral como 2007, como la publicidad oficial, las obras de limpieza del Riachuelo, los fondos fiduciarios, los planes sociales, la obra pública y las empresa re-estatizadas.
La FIA pondrá especial atención al "alquiler, concesión, renta, venta y demás transacciones vinculadas a bienes del Estado Nacional, contratación y distribución de pauta publicitaria, contratación y gestión de procesos tendientes a la limpieza y saneamiento del Riachuelo, fondos fiduciarios y gestión de planes sociales", según informó un cable de la agencia de noticias DyN.
Los considerandos del Plan Anual hace hincapié en "los crecientes reclamos vinculados a límites a la libertad de expresión por vías directas e indirectas, a profesionales y medios de
comunicación, que pueden impactar sobre la calidad de las instituciones y limitar las posibilidades de control sobre los actos de gobierno".
La FIA destacó que "el registro de un porcentaje relevante de los fondos públicos por fuera de los sistemas y esquema de controles estatales, configura una situación particularmente sensible que merece ser seguida y atendida de forma activa".
También se focalizará en las "obras públicas producción de bienes a cargo del Estado, regulación y subsidio de transportes públicos, renegociación de contratos de agua, transporte, energía, comunicaciones y demás servicios públicos y subsidios en general".
El proyecto de trabajo se propone avanzar sobre "el uso clientelar de las inversiones en obra pública y la distribución de planes sociales", que "adquieren particular relevancia en períodos electorales".