La interna porteña se vivió a flor de piel anoche, en la entrega de los Premios Perfil 2008. Los tres últimos jefes de Gobierno de la Ciudad se dieron cita en el Hotel Sheraton, casi de manera simultánea, y los cruces fueron inevitables.
El que se llevó todos los flashes fue el actual mandatario de la Ciudad, Mauricio Macri, quien también fue blanco de los dardos verbales de sus antecesores. Al comienzo, hubo un saludo protocolar entre ellos, pero fue nada más eso, un gesto, después del cual volvieron las diferencias, plasmadas en sus declaraciones.
El legislador Aníbal Ibarra fue directo. Cuando Perfil.com le pidió su opinión acerca de los cinco meses de gestión del PRO en la Ciudad, el ex jefe de Gobierno aseveró: “Yo antes de cerrar un juicio prefiero que pase más tiempo, pero puedo decir algunas cosas: venía con muchos equipos y me parece que no, hay mucha improvisación".
Acto seguido, le recriminó a Macri sus promesas incumplidas. " Dijo que no aumentaba los impuestos y aumentó; dijo que apoyaba la ley de comunas y voto contra la ley de comunas; dijo que iba a arreglar 400 escuelas y arregló siete, qué sé yo...”, enumeró .
Jorge Telerman, el último jefe de Gobierno, prefirió eludir la confrontación directa y utilizó la ironía. "Somos de Perfil.com le podemos hacer algunas preguntas en cámara", le preguntó este medio. "Yo soy de Palermo", respondió él, risueño. "¿Cómo está Palermo ahora, en la gestión macrista?", fue la pregunta. " Palermo, muy bien, afortunadamente nos resiste a los jefes de Gobierno, a mí, a Mauricio", contestó.La repregunta fue automática: "¿Esto quiere decir que la gestión de Macri es mala?". “Esto significa que la ciudad de Buenos Aires puede resistir cualquier cosa”, bromeó.
Cuando se le pidió analizar la gestión de Macri dijo que no era el momento para hablar del tema. “Este es un momento donde estamos festejando. De este tipo de cosas hay que hablar en otras circunstancias”, se justificó con afrancesada elegancia.