El presidente Néstor Kirchner pronunció junto al gobernador bonaerense, Felipe Solá, un breve discurso donde anunció en Casa Rosada la licitación de la autopista Pilar-Pergamino, obra “que demandará una inversión de 1.500 millones de pesos y dará trabajo a 500 personas”.
Cuando se esperaba alguna mención sobre los violentos episodios ocurridos ayer en la quinta de San Vicente durante el traslado de los restos del ex presidente Juan Domingo Perón, el mandatario optó por hacer de cuenta que nada sucedió. Llamativo, si se tiene en consideración la verborragia que acostumbra.
Sí, optó por informar que la actividad económica creció 8,6 por ciento en agosto respecto de igual mes del 2005, de acuerdo con los datos que difundirá hoy el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
Kirchner indicó que la actividad económica entre julio y agosto creció alrededor de 1,1 por ciento, "el nivel más importante" después del de mayo que fue de 1,5.
Antes de la ceremonia, el Presidente se había reunido con Solá para hablar sobre los hechos ocurridos entre gremialistas en la quinta. Del encuentro participó también el ministro del Interior, Aníbal Fernández, quien ya había mantenido contactos con el ministro de Seguridad bonaerense, León Arslanián.
Por su parte, Solá había ido esta mañana a San Vicente y, aunque dijo que no iba a realizar declaraciones, se mostró "apenado" por lo sucedido ayer. Luego se dirigió a la Casa Rosada.
El mandatario transitó el lugar junto la Policía Científica quien realiza la recolección de pruebas.
“Perdónenme pero no voy a realizar declaraciones, estoy muy apenado y voy a recorrer las instalaciones para poder verificar personalmente los desmanes que allí ocurrieron”, dijo Solá a su ingreso.
Ayer grupos de militantes de diferentes sectores gremiales se enfrentaron con piedras y palos en los alrededores de ese lugar, provocando cerca de 50 heridos.