La Cámara Federal declaró la nulidad de la causa en la que el agregado comercial en Italia y ex secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, fue citado a indagatoria y estaba siendo investigado por el cotillón "anti Clarín" desplegado en el Mercado Central.
Fuentes judiciales informaron a DyN que la Sala I de la Cámara consideró "arbitraria" la decisión del juez Claudio Bonadio de continuar la investigación con la sola intervención de la querella, a cargo del Grupo Clarín, sin justificar esa decisión.
Bonadio había sido apartado a mediados de septiembre y en su reemplazo asumió el expediente Luis Rodríguez, a quien ahora la Cámara le ordenó decidir si reinicia la investigación.
La causa se inició por una denuncia de Clarín contra Moreno y funcionarios del Mercado Central por los delitos de incitación a la violencia y malversación de caudales públicos porque en 2011 en esa dependencia se repartía merchandising y se desplegaban banderas con leyendas en contra del grupo de medios.
El fiscal federal Federico Delgado se inclinó por desestimar la denuncia porque entendía que no había delito, por lo que Bonadio archivó el caso, pero luego el Grupo Clarín fue aceptado como querellante y, ante una apelación, la Cámara Federal de Casación Penal ordenó reabrir el expediente y continuar con la investigación.
Así, Bonadio citó a Moreno a indagatoria y el 18 de julio pasado el funcionario declaró ante el juez y lo recusó porque en la audiencia reveló que al comienzo de la causa tuvo un encuentro con el magistrado en el que le "aconsejó" cómo actuar en la causa como por ejemplo cambiar a su abogado, Alejandro Rúa, lo que consideró una "actitud de hostigamiento" porque no le hizo caso y fue convocado a declarar como acusado.
La Sala I de la Cámara, por mayoría, dijo que no podía dar por acreditado ese encuentro entre Bonadio y Moreno pero consideró que "la evidente tensión" entre ambos alcanzaba para apartar al juez de la causa.
Luego, la defensa de Moreno planteó la nulidad, a lo que los camaristas Eduardo Freiler, Jorge Ballestero y Eduardo Farah hicieron lugar.
Los magistrados explicaron que cuando la Cámara de Casación dispuso continuar la investigación con la acusación privada del Grupo Clarín, el juez Bonadio no fundamentó por qué avanzó en el expediente.
En su voto, el juez Farah sostuvo que "la instrucción del sumario para dar inicio a la investigación exigía un pronunciamiento expreso de dicho juez que dirima la controversia planteada frente al pedido desestimatorio por inexistencia de delito efectuado por el Fiscal Dr. Delgado y la requisitoria de investigación formulada por los querellantes en representación del Grupo Clarín S.A." También consideró que Bonadio "omitió dictar ese pronunciamiento y avanzó en la instrucción al punto de convocar a prestar declaración indagatoria a algunos de los imputados".