Un departamento con cochera, una parcela en un cementerio de Pilar, ahorros por 6 mil pesos, 5 mil pesos en efectivo y 55 mil dólares son los únicos bienes que el juez federal Norberto Oyarbide presentó en su declaración jurada ante el Consejo de la Magistratura.
El juez federal, que investiga los expedientes más sensibles para el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, no tiene automóviles registrados, no contrajo ninguna deuda ni hipoteca en los últimos años y no posee tarjetas de crédito.
La última declaración patrimonial, fechada en mayo de 2009, tiene más espacios vacíos que casilleros completos. El contenido de la declaración jurada contrasta con el suntuoso estilo de vida que caracteriza al magistrado.
En los últimos meses, Oyarbide se vio envuelto en una nueva polémica por la adquisición de un anillo, valuado –según trascendidos periodísticos– en 250 mil dólares. Luego, la revista Noticias publicó que el magistrado estaba hospedado en un lujoso hotel de Punta Cana cuya suite costaba 1.370 dólares por día.
Por si fuera poco, Lorena Martins, la hija de un ex miembro de la SIDE, denunció vínculos entre el juez y su padre, Raúl Martins. Desde México, Martins admitió haber invitado al magistrado a brindar clases de Instrucción Cívica en un colegio secundario y reconoció haberle comprado una parcela en un cementerio privado. Pero no precisó si se trata de la propiedad que hoy Oyarbide asegura haber adquirido con fondos propios.
El titular del Juzgado Federal y Correccional Nº 5 de la Capital Federal declaró percibir un sueldo neto de 13.601 pesos en su última declaración patrimonial. Además de un departamento de 70 metros cuadrados valuado en 67.605 pesos y una parcela en el Jardín de Paz de Pilar cuyo valor no precisó. El magistrado declaró poseer 6.799 pesos en una caja de ahorro, 5 mil pesos en efectivo y 55 mil dólares.
“Existen indicios de inconsistencia entre los ingresos que declara el juez Oyarbide y lo que muestra públicamente”, explicó Ezequiel Nino, codirector de la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ), una de las organizaciones no gubernamentales que bregan por la transparencia en el Poder Judicial.
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