El Poder Judicial allanó hoy las oficinas de la empresa Arfinsa, que cobró los más de 43 millones de pesos de parte de la Procuración General de la Nación para la compra de un edificio para ese organismo, caso por el que fue imputada la jefa de los fiscales, Alejandra Gils Carbó.
El juez federal Julián Ercolini, a pedido del fiscal Eduardo Taiano, allanó las oficinas de la compañía ubicadas en Avenida del Libertador al 400, en la zona porteña de Retiro, informaron fuentes judiciales a DyN.
Arfinsa, del grupo Bemberg, pedía 43,8 millones de pesos por el edificio de la calle Perón al 600, y en la operación habría habido una comisión de 7,7 millones de pesos que esa empresa le pagó a la inmobiliaria Jaureguiberry Asesores Inmobiliarios, dijeron fuentes judiciales.
De acuerdo con la investigación, esa empresa contrató a su vez a Juan Carlos Thill, hermano del contador Guillermo Bellingi, subdirector general de la Procuración en el momento de la licitación del edificio.
La semana pasada se habían hecho allanamientos en distintos puntos en edificios de la Procuración y domicilios particulares.
El fiscal Taiano ordenó a la división Cibercrimen de la Policía de la Ciudad realizar un peritaje sobre las computadoras y soportes informáticos secuestrados en esos allanamientos, que comenzará la semana próxima.
En las últimas horas trascendió de voceros que la Procuradora -para quien se pidió el juicio político- "no tiene pensado renunciar y se siente más fuerte que antes".